CREADORES Y CRIATURAS
CON LA MIRADA PUESTA EN EL DISEÑO DE PRINCIPIOS DEL SIGLO XX, GERMANO MARCHETTI CREA MUEBLES QUE HACEN DE LA MEZCLA SU SANTO Y SEÑA.
El ebanista prodigioso. Germano Marchetti nos enseña sus muebles con carácter.
Hace un año, Germano Marchetti decidía abrir su showroom en el centro de Barcelona, un local en pleno Ensanche donde mostrar sus cuidados muebles. El napolitano llegó al mundo del diseño de la mano del arquitecto Peter Page, a quien conoció en 1997 en Miami, y con el que colaboró como asistente en proyectos de interiorismo. Gracias a Page, accedió a las residencias mejor decoradas de South Beach, entre ellas, la de GianniVersace.
El salto a la creación no se hizo esperar.Con una amplia formación cultural y artística, Marchetti comenzó a idear muebles de fuerte personalidad, marcados por el mix de estilos de distintas épocas y con un inconfundible aire retro. No en vano, el diseñador se declara un apasionado de las corrientes artísticas de las primeras décadas del siglo pasado: «El Art Déco o el Movimiento Moderno, con nombres como Adrian Pearsall, Ico Parisi, Jean Prouvé o Paolo Scheggi, son una clara referencia en mis trabajos. Estamos ante un período histórico muy creativo,en el que se empezaron a mezclar varios materiales como el metal,el mármol, las piedras exóticas y la madera en una única pieza».
El cuidado por el detalle es otra característica de la producción del italiano.Su mobiliario,que realiza de forma artesanal con las técnicas tradicionales de la ebanistería, puede personalizarse, ya que es posible adaptar los diseños base de la colección a las necesidades de cada cliente. Pl. Letamendi, 37, 4-3. @germanomarchettidesign
Arriba, Germano Marchetti, en su sofá The Retró. En el centro, muebles de la serie Ricerche Temporali: mesilla bicolor Le Petit, con bandejas en los laterales; mesa de eucalipto, metal y piedra Discóbolo, inspirada en los años 30; y cómoda formada por dos piezas en madera de iroco natural y pintada, unidas en una misma base. Junto a estas líneas, rincón del restaurante We Bistrot, con una deco vintage para la que Marchetti reacondicionó el mobiliario.