ELEMENTOS REINVENTADOS
El dormitorio tiene un punto romántico. La cama se ha enmarcado con un biombo antiguo a modo de cabecero. Procede de Carina Casanovas, como también la butaca y el retrato antiguo sobre la mesilla. Las láminas botánicas son de Abrils Studio y las almohadas, de Pepe Peñalver. En la otra página, la cocina, dispuesta en península, está equipada con mobiliario blanco y puertas lisas con apertura de uñero. Dispone de una barra para desayunos con dos taburetes shabby chic de Abrils Studio.
Los dueños heredaron la propiedad, que había pertenecido a sus padres y tenía un look bastante anticuado con techos, cornisas y ménsulas de madera muy pesados que recargaban el espacio y lo empequeñecían. La propuesta de Abrils Studio fue “limpiarlo” y comunicar visualmente diferentes estancias, para lo que se prescindió de algunos tabiques y puertas, como los que había entre cocina y entrada, y entre esta y el salón: «El punto fuerte del proyecto fue crear una diagonal desde la que se pudieran ver los distintos ambientes, incluido el patio, que da profundidad a la planta principal de la vivienda». Una vez eliminado todo lo que sobraba, se dotó a la casa de esa luminosidad arrebatadora que es su aspecto más característico, y lo que los clientes anhelaban: «Unos interiores muy tranquilos, sin mucho color y opuestos a lo que había, para así sentir el espacio como auténticamente suyo», concluye Anna Alegre. ¡Deseo cumplido!