¿Cual se adapta mejor a tu familia?
Perros
Son los mejores compañeros de los niños ya que se establecen vínculos emocionales muy estrechos. Nuestros hijos además aprenden a respetarles y a comprender cuándo no hay que atosigarles.
Gatos
Son más independientes, pero también son muy cariñosos y buscan compañía. Aunque no se les saque a pasear también requieren cuidados y estimulará la capacidad de respeto de los niños.
Conejos
Requieren menos espacio que un perro o un gato pero también pueden ser excelentes compañeros ya que son muy cariñosos. Si tu hijo tiene alergia a los ácaros del pelo, pueden ser una buena opción.
Peces
Requieren muchos cuidados y atención para que su pecera o acuario siempre esté limpio. Aumentan, sin duda, el sentido de responsabilidad, pero son más fáciles de manejar.
Hámster
Ocupan poco espacio y son más fáciles de cuidar pero no hay que descuidarlos. Además, son muy juguetones y los niños se lo pasarán en grande observando cómo aprenden a superar los obstáculos que les pongáis en la jaula.