Errores que cometemos
Escasez
El 44 % de las meriendas solo contienen un alimento y el 46,5 % solo dos (leche y galletas o bocadillo y zumo), según un estudio realizado por la Universidad de Zaragoza. Esta comida a media tarde debería aportar el 10 % de lo que come al día. No te excedas ni quedes corta.
Pocos nutrientes
Únicamente el 7,3 % de las meriendas se componen de yogur, fruta y cereales, los alimentos recomendados por los expertos. El bocadillo es la comida más popular entre las meriendas infantiles españolas. Sin embargo, a parte de los cereales que aporta el pan, lo correcto sería que incluyéramos también algún lácteo y una pieza de fruta.
Crear malos hábitos
La merienda debe ser proporcionada para evitar hábitos inadecuados como picar entre horas por no haberse saciado. Por otro lado, no debemos darles bollería industrial (el 34 % admite tomarla al menos una vez por semana) para crear en nuestros hijos hábitos de vida saludable. Teniendo en cuenta la elevada prevalencia del sobrepeso y la obesidad en España, ofrecerles a nuestros hijos alimentos frescos y sanos incidirá positivamente en la prevención de enfermedades como la diabetes.
Bajar la guardia
La calidad y frecuencia de la merienda disminuye con la edad. De 3 a 6 años meriendan en torno a un 84,4 %, frente al 78,3 % que lo hacen de 7 a 12 años. Aunque tus hijos vayan creciendo, cuidar su alimentación debe seguir siendo para ti tan importante como cuando era un bebé. Intenta que la fruta, los lácteos y los cereales estén siempre presentes.