Ser Padres

Eugenia “nos ha cambiado, somos mejores”

- Nacho Gros.

Padre de Eugenia, 5 años, niña con parálisis cerebral.

Eugenia es la tercera de seis hermanas (la sexta está a punto de nacer). Tiene 5 años y medio y desde que mi mujer estaba embarazada de tres meses vieron que estaba afecta por citomegalo­virus, que en un adulto no supone nada mucho más allá de un catarro pero que en un bebé y más aún durante el embarazo es, en muchos casos, letal. Pero Eugenia no murió y nació con parálisis cerebral.

La parálisis cerebral es algo tan amplio que no sabíamos a que nos enfrentába­mos y nadie nos daba garantías de nada. Con lo que sí fueron muy claros los médicos fue con el futuro de gastos inmensos al que nos enfrentába­mos y con que mi hija nunca sonreiría. Eso me afectó muchísimo, no supe muy bien cómo reaccionar, me angustiaba qué íbamos a hacer, cómo iba a salir ella adelante... Y con todo esto en la cabeza salí a correr y ahí nació el germen de lo que hoy es la Asociación RUN 4 SMILES un proyecto con el que pretendemo­s conseguir dinero para ayudar a familias como la nuestra, que tienen que asumir gastos inmensos. Porque sí que hay ayudas, no lo voy a negar, pero son mínimas.

A medida que pasa el tiempo, la situación de Eugenia es mejor. Ha empezado a ir a un colegio especial donde tiene sus clases, sus amigas… Y es una niña feliz. Sus hermanas juegan con ella como lo que es, una niña alegre que necesita felicidad en su vida. Eso no quita que sus necesidade­s sean muchas y muy concretas, que no pueda andar ni sentarse sola, que no pueda comer por sí misma, que no hable y que solo pueda escuchar si lleva su audífono… Que su vida no sea cien por cien normal no significa que no lo sea la de mi familia. Un niño sano no tiene por qué darte menos guerra que un niño con problemas.

No voy a negar la realidad. El principio fue muy duro y yo me enfadé mucho, con Dios, con la vida, no le encontraba el sentido, no entendía por qué a nosotros nos había tocado vivir esto, por qué a ella. Pero ese dolor también se pasa. También desde el principio, mi mujer Paula y yo decidimos que no queríamos cenizos, que nosotros necesitába­mos buenas noticias, que queríamos dar a las niñas una vida alegre... Pero la alegría resulta que nos la da ella. Nuestra hija nos ha cambiado, nos ha hecho ser mejores, de otra manera, nos da una fuerza que no pensé que existiera. Y Eugenia, la que no iba a reírse nunca, es una niña súper expresiva, que da solo amor y que se ríe a carcajadas. Esa es su victoria.

 ??  ??
 ??  ?? Eugenia con sus padres, Paula y Nacho, y sus hermanas: Adriana, de 9 años: Lucía, de 7; y Covadonga y Paula de 4.
Eugenia con sus padres, Paula y Nacho, y sus hermanas: Adriana, de 9 años: Lucía, de 7; y Covadonga y Paula de 4.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain