Salud Desarrollo precoz.
Se considera normal tener la primera menstruación entre los 9 y los 15 años, aunque la media en España va de los 11 a los 13. Sin embargo, hay niñas que empiezan a desarrollarse a los ¡7 años! ¿Por qué?
La pubertad es el tiempo durante el cual maduran las características sexuales y físicas de una persona. Con el inicio de la pubertad, las gónadas –ovarios y testículos– comienzan a funcionar. Esto implica una serie de cambios físicos: se desarrollan las características sexuales secundarias (aparece el vello axilar y púbico, se desarrollan los senos y el pene y los testículos aumentan de tamaño); crecen de manera acelerada los huesos y músculos (que se evidencia en drásticos aumentos de estatura); además de otros cambios significativos en la forma y tamaño del cuerpo (aumenta el tamaño de las caderas en las niñas y aparece vello en rostro, piernas y pecho de los niños, y empieza a hacerse más grave su voz y a marcarse la nuez en el cuello).
La pubertad precoz se define como la aparición de caracteres sexuales secundarios no fisiológicos (desarrollo mamario, vello púbico y vello axilar) antes de los 8 años en las niñas y de los 9 años en los niños. Si bien este es un hecho que afecta aproximadamente al 1-2 por ciento de la población, en la mayoría de los casos, obedece a un problema médico. En el caso de las niñas, explica el ginecólogo Antonio Hernández Sánchez, “lo primero que suele suceder es la aparición del botón mamario (telarquia); en segundo lugar, la aparición del vello púbico (pubarquia), aunque en algunos casos puede preceder a la telarquia; en tercer lugar, sale el vello axilar y por último, la menarquía o primera menstruación”. En cualquier caso, lo más importante, añade, “es tranquilizar a los padres y a las niñas porque la mayoría son casos de pubertad precoz incompleta que no progresan hacia formas más graves”. De todas formas, siempre es recomendable consultar con el pediatra o el ginecólogo.
¿Por qué sucede?
Según la Asociación Española de Pediatría (AEP), la edad de inicio de la pubertad se ha ido adelantando de manera significativa en los últimos años, en parte debido a contaminantes ambientales de acción estrogénica.“Existen muchas teorías sobre las causas de la pubertad precoz –explica el experto–, pero no hay evidencia suficiente que apoye que las hormonas en la leche u otros alimentos, agentes químicos ambientales o mensajes de tipo sexual en los medios de comunicación puedan estar detrás del origen”.
¿Se puede detener?
En algunas casos extremos, y solo bajo la supervisión estricta del pediatra o ginecólogo, puede tratarse farmacológicamente a las niñas con diagnóstico de pubertad precoz verdadera. Esto implicaría, explica el ginecólogo, “que la regla desaparece, el volumen mamario regresa casi totalmente, la velocidad de crecimiento se reduce a niveles prepuberales y el ritmo de aceleración de la maduración ósea se retarda, mejorando el pronóstico de talla final”.
¿Tiene consecuencias negativas?
Si se trata de una pubertad precoz verdadera, explica el doctor Hernández, “es un importante problema de salud para las niñas afectadas. No solo hay que preocuparse por el cierre precoz de los cartílagos de crecimiento (que implican una talla baja) sino también por las severas consecuencias psicológicas, sociales y educativas que acarrean. Las niñas afectadas, lejos de entender que su cuerpo se ha desarrollado prematuramente, se consideran diferentes del resto sin explicación alguna. Esto puede ocasionar alteraciones psicológicas o adaptativas”.