“No creemos que el diagnóstico sirva para nada”
L.L.: Desde niña crecí sintiéndome rara, caía mal por repipi, por cómo hablaba, por las preguntas que me hacía sobre la infinitud, el existencialismo… Pero cuando yo era niña no era algo a lo que se le concediera demasiada importancia. A mí nunca me dijeron que yo era especial por mucho que yo supiera que lo era. Con el tiempo, pruebas que me he hecho por mi cuenta y lo que he aprendido en la carrera de Psicología, sé que tengo Altas Capacidades y mi hija también. El coeficiente no me preocupa ni cubrir las inquietudes intelectuales, sino la integración. La ausencia de apoyo emocional es el problema, el aburrimiento y el aislamiento.
I.R.: Mientras crecía no lo percibía porque sencillamente “yo era así”. Sí sé que desde muy pequeña usaba un lenguaje muy complejo y nunca me ha costado estudiar. Ahora con 14 años no me siento especial y no sufro por ver que llego un poco más lejos que los demás. Me interesan muchas cosas: Me encanta escribir y leer. Siento una curiosidad muy intensa por las ciencias. No me cuesta leer textos complejos sobre el Universo o de física escritos para gente con más formación que la mía. También me interesa la psicología. Este año he empezado un proyecto empresarial de venta de camisetas por internet IGB (www.3gbdesign. com) y el emprendimiento también me encanta.