Ser Padres

¿Cómo acabar con ellas?

-

Cuando un niño empieza a decir palabrotas, de poco sirve abordarle con preguntas del tipo “¿Y tú dónde has oído eso?”, “¿Quién te lo ha enseñado?”, “¿Sabes qué significa eso que acabas de decir?”, “¿Cómo se te ocurre decir esa barbaridad?”... Aunque no preguntas naturales, no siempre tienen respuesta. Para acabar con las palabrotas del niño hay que centrarse más en nuestra actitud como padres y no tanto en la suya como niño.

Explicar el significad­o

Es importante que el niño entienda que no sólo hay palabras malsonante­s, sino que pueden ofender o incomodar a los demás, y que, casi siempre, hay una alternativ­a ‘ no-palabrota’ para casi todo lo que quiera expresar.

Ignorarle

Si el niño persiste en decir palabrotas a veces la mejor solución es ignorar su comportami­ento como hacemos ante cualquier otro que tiene para llamar la atención. Es bastante posible que dejen de atraerle y pase a otra cosa.

Predicar con el ejemplo

Nadie dice palabrotas en casa ni delante de los niños. Aprenden por imitación, así que si te oyen soltar sapos y culebras por la boca viendo el fútbol, en un atasco o si te pillas un dedo con la puerta... él lo hará.

No alterarnos

A veces nada de esto sirve y hay que pasar a retirada de beneficios porque es una forma clara de desobedece­r. Lo importante es explicar, no alterarse y, por supuesto, no soltar un taco porque estáis hartos de esa actitud.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain