El regreso del león
Ibrahimovic volvió el sábado con hambre y rugiendo por volver a ser el jefe de la manada de Mourinho, que sigue peleando por la Premier
Zlatan Ibrahimovic está de vuelta a los terrenos de juego. Old Trafford, el mismo escenario donde siete meses antes el delantero se rompió los ligamentos de su rodilla, presenció y ovacionó el regreso del sueco, que disputó 15 minutos en la victoria del Manchester United sobre el Newcastle de Rafa
Benítez. La vuelta se produjo un mes antes de lo que vaticinaban los pronósticos. Ibrahimovic, en su tono más genuino, no se sorprendió de su rápida recuperación. “Los leones no nos recuperamos igual que los humanos”, afirmó tras el partido. Más tarde, en cambio, mostró su versión más humana con un mensaje en sus redes sociales agradeciendo el apoyo recibido durante la recuperación: “Esto no fue el trabajo de un hombre solo, sin todos vosotros no estaría de vuelta jugando al fútbol”. El león sueco será un refuerzo de lujo para la escuadra de Mourinho, y tuvo suficiente con los minutos que jugó para dejar destellos de su hambre de fútbol con un plástico remate de tijera que casi se convierte en el quinto gol del partido. Este año, sin embargo, Zlatan está destinado a ocupar un rol distinto en la plantilla. Con la llegada de
Lukaku, al que Mourinho consideró hace semanas un “intocable”, la referencia ofensiva titular está cubierta. El portugués apostó por traer un delantero finalizador, aunque menos completo que Ibrahimovic. El nórdico ahora tiene por delante el enésimo reto de su carrera: hacerse un sitio en un equipo donde no parte como titular.
Mourinho apostó el sábado por juntar a los dos futbolistas. Zlatan
entró en el minuto 77 por Martial, y compartió parcela ofensiva con Lukaku. Más descolgado, actuando como alma libre, Ibra tuvo libertad para bajar a recibir entre líneas, dejando más fijo en el área a su compañero. No tener que conllevar toda la responsabilidad anota-
El reto inmediato de Mourinho es que el sueco y Lukaku encajen en el mismo equipo
dora como en la temporada anterior, cuando se encontró muy solo en el aspecto realizador, puede beneficiarle en estos momentos de su carrera. “Hemos jugado muchas veces con dos delanteros, y por supuesto que Ibra y Lukaku pueden jugar juntos”, apuntó Mourinho convencido de que los dos pueden encajar en un mismo once. Pese a caer lesionado en el mes de abril, los registros de Zlatan en su temporada de debut en Old Trafford fueron excelentes. El sueco firmó 28 goles y 10 asistencias en todas las competiciones, siendo con diferencia el máximo goleador del equipo. El primero de esta temporada lo rozó en 15 minutos. El león sueco ha vuelto. Y lo ha hecho con hambre y... rugiendo