Los `Hispanos' ya están en Egipto
Los 18 convocados por el seleccionador, Jordi Ribera, aterrizaron en El Cairo y ya preparan su estreno ante una mermada selección brasileña
La selección española de balonmano aterrizó en la tarde de ayer en El Cairo, preparada para luchar por un Mundial que quieren volver a saborear tras los conquistados en 2005 en Túnez y en 2013 en Barcelona. No será sencillo. A la dificultad que supone una cita mundialista, donde se enfrentan las mejores selecciones de todo el mundo, hay que añadirle la incógnita de cómo afectará la pandemia y el coronavirus, aunque muchos de los jugadores ya estén adaptados a jugar sin público en las gradas. España debutará mañana y lo hará ante una Brasil que pese a las bajas por covid como la del azulgra
España cerrará su participación en el Grupo B con los duelos de Polonia, domingo, y Túnez, martes
na Thiagus Petrus, será seguro competitiva. Será la primera prueba en este Mundial y el primer duelo tras la victoria en el partido de preparación ante Catar.
REPETIR LOS ÉXITOS EUROPEOS No se ha podido probar más la selección por el temporal `Filomena', pero ello no será excusa para que los 18 `Hispanos' se intenten quitar la espina mundialista de las dos últimas ediciones, donde cayeron en cuartos en 2017 y fueron séptimos en 2019. Repetir los éxitos de los pasados Europeos, donde salieron campeones en 2018 y 2020, será el camino a seguir. Y por eso Jordi Ribera ha convocado a su bloque del pasado Europeo a filas. Hasta 16 jugadores de los que se hicieron con la medalla de oro hace justo un año han viajado a Egipto, con las únicas novedades del portero
Sergey Hernández y el pivote Rubén Marchán, que toma el relevo de Julen Aguinagalde, principal ausencia.
Los `Hispanos' se verán las caras mañana contra Brasil (18.00 h) y el domingo ante Polonia (20.30h). Cerrará el grupo B con el duelo que le enfrente a Túnez el próximo martes (18.00 h). Esta será la primera parte de un camino que se espere que llegue muy lejos. La selección y Jordi Ribera tienen depositadas muchas esperanzas en este Mundial, aunque sabedores de que el reto es mayúsculo.