El Espanyol se echa la siesta
Javi Puado y De Tomás encarrilaron un duelo que se torció en la segunda mitad. La mayor ambición del Rayo resultó clave en su remontada en Cornellà
Inexplicable, increíble e inaceptable. El Espanyol del 2020 se reencarnó y repitió los vicios que le condenaron al descenso la temporada pasada. En una segunda parte para analizar al detalle por Vicente Moreno, los blanquiazules desperdiciaron un 2-0 favorable y cayeron en manos de un Rayo que ganó por tesón, ambición y mayor `testiculina'.
El mal fario de Montilivi se esfumó de un plumazo. Una acción coral, eléctrica, al primer toque y precisa desembocó en el 1-0 de Puado. El canterano le ganó la batalla aérea a Saveljich en un centro de Darder y peinó lo suficiente para superar la estirada de Dimitrievski. No tuvo inconveniente el Espanyol para otorgar la posesión. Están cómodos los blanquiazules en esa versión caparazón. La previsibilidad vallecana ayudó ante la disposición perica. Un zurdazo de Isi y un gol anulado por claro fuera de juego de Álvaro, las únicas aproximaciones de los entrenados por Iraola. Vicente Moreno ordenaba presión desde la banda, y en ese apartado, Keidi Bare es su alumno aventajado. El albanés es un lobo en la medular. Absolutamente necesario para compensar y equilibrar al equipo. La línea adelantada provocó errores en la salida franjirroja. Perdonó una De Tomás. En la segunda, a la cazuela.
Golpeo a la base del palo tras una hábil asistencia de Embarba. Decimotercer gol de la temporada y adiós a tres jornadas sin ver portería.
Fran García estrelló un centro-chut contra la escuadra y el VAR se inhibió en unas claras manos en el área de
Isi en el epílogo del primer acto. Otro penalti, al limbo.
`RAYADOS' Isi ya retrató a Diego López en Vallecas y volvió a hacerlo con un libre directo perfectamente ejecutado por su guante izquierdo. Los madrileños se metían en el partido y mostraban una cara menos amable, más vertical y voraz. Y resultó determinante. El Espanyol pecó de vicios pasados y se desmoronó. Montiel igualó con un zurdazo impresionante y Andrés ganó línea de fondo para que Álvaro culminara la remontada. Moreno reaccionó tarde con los cambios. Atacar a la desesperada nunca es buena opción. Tampoco ayer.
De Tomás frenó su sequía ante la portería contraria con un soberbio gol y ya acumula trece este curso
El cuadro perico suma su segundo tropiezo en casa ante un Rayo que ya le ganó en la ida en Vallecas