El Schalke, a salir del abismo
El cuadro de Gross es el peor colista de la historia de la Bundesliga desde la 74-75, sumando tan solo ocho puntos
Esta racha de partidos sin ganar está siendo muy dura, notamos la presión, es normal después de estos partidos. Aun así, confiamos en volver a ser el Schalke que la gente vio. Tenemos que trabajar más duro que nunca para darle la vuelta a esta situación”. No son palabras de hoy. Ni de ayer. Son de junio del año pasado, cuando Omar Mascarell charló para SPORT. Su Schalke andaba ya en tierra de nadie en la Bundesliga. A partir de entonces, los resultados han caído en picado. De esas declaraciones del capitán ha llovido ya. Ahora estamos en otra temporada. Pero nada ha cambiado. De hecho, ha ido a peor. A mucho peor. El equipo ha mantenido las malas vibraciones de la temporada pasada y ha caído en el abismo tras un inicio de campaña 20-21 terrible. No se veía algo así en la cuenca del Ruhr en muchos años. Los del Veltins Arena están al borde del abismo. Son colistas, sumando tan solo ocho puntos en 22 jornadas disputadas. De hecho, es el peor colista desde la temporada 74-75, cuando las victorias aún valían dos puntos.
Qué lejos ha quedado aquel Schalke que todavía andaba por Europa, con Raúl y Huntelaar formando una dupla de garantías arriba. Ahora está Hoppe, la gran esperanza de los de Gelsenkirchen tras notar un hat-trick a las primeras de cambio. Por jugadores no será. Serdar, Harit, Mascarell... El Schalke tiene equipo y calidad para competir por algo más que salvar la temporada.
Pero ahora no hay más remedio que sumar victorias como sea. En esas anda el capitán, que no piensa tirar la toalla. Tampoco la directiva, que en este pasado mercado de fichajes se ha reforzado con la llegada de veteranos ilustres. Aterrizó Mustafi a última hora, pero sobre todo volvieron Kolasinac y Huntelaar. Tiene también su lado poético esta historia del Schalke. Ambos se marcharon en épocas distintas del Veltins Arena, pero lo hicieron dejando a un Schalke que estaba entre los grandes de Alemania. Ahora regresan para salvarlo del desastre del descenso. Solo tendrán unos pocos meses. Quedan aún jornadas y la salvación está a nueve puntos. Difícil, sí, pero no imposible. El Schalke va a tener que jugar muchas finales.
Huntelaar y Kolasinac, que vivieron mejores tiempos en el Veltins, vuelven para salvarlo