La peor sequía de esta temporada
Además de enlazar tres derrotas por primera vez en lo que va de curso, los pupilos de Francisco acumulan 319 minutos sin ver portería
Este sábado toca reválida en Anduva. No queda otra. El Girona necesita ganar para mantener sus opciones, cada vez más lejanas, de atrapar los puestos de promoción de ascenso. El equipo se presenta a la cita contra el Mirandés con deberes por delante. Necesita una reacción para dejar atrás un bache de resultados porque, haciendo caso a los números, el actual es el momento más delicado de la presente temporada. Hasta la fecha nunca se habían acumulado tres derrotas consecutivas contando ambas competiciones oficiales: Liga y Copa del Rey.
Los de Francisco decían adiós a la Copa mostrando una muy buena imagen contra todo un Villarreal para acabar cayendo por la mínima: 0-1. Después, derrota en el campo del Mallorca por culpa de un gol en el tiempo de descuento (1-0) y en Montilivi, siete días más tarde, tropiezo frente al Leganés (0-2) con un par de dianas en el último cuarto de hora.
PÓLVORA MOJADA Parte de culpa de esta racha la tiene la poca productividad en ataque, un mal que acompaña a esta plantilla desde hace tiempo y que parece no tener solución. El Girona vive su peor sequía del curso. Son ya 319 minutos consecutivos sin ver portería. El último que lo consiguió fue el delantero Pablo Moreno, con su tanto en el minuto 41 del derbi frente al Espanyol en casa. Desde entonces, nada de nada en el segundo tiempo de ese mismo partido ni en los siguientes tres duelos.
Hasta ahora, como mucho, el equipo se había quedado dos partidos seguidos a cero, pero a la tercera siempre iba la vencida. Le había pasado hasta tres veces hasta ahora: ante el Sporting (2-0) y Fuenlabrada; contra Málaga (0-1) y Alcorcón (1-0); y con el Tenerife (2-0) y Sabadell (0-0).
El Girona hila tres partidos y medio sin marcar, el bache más pronunciado de esta campaña