“Mi riñón nuevo va como Jordi Alba, a 200 por hora”

Recuperado ya de tu famoso trasplante de riñón...

Sí, estoy ya muy recuperado. Sabía desde hace muchos años que acabaría con trasplante porque mi función renal hacía mucho tiempo que iba a menos, pero no lo hice público. Al haber sido en plena pandemia quise agradecérselo a los sanitarios y a mi hermana que fue la donante. Lo puse en redes y el trasplante se hizo público y famoso.

Estás en plena forma y en muchos proyectos.

Bueno, nunca he sido Saúl Craviotto (risas), Estoy en la `forma Corbacho'. No me voy a meter ahora a correr maratones.

Pero sí en plena forma a nivel de escenarios: `Ante todo mucha calma' dentro del proyecto La Casa de la Risa; `Cómicos nuestros' en el canal Somos y el programa `Anem per feina' en Betvé.

Esta profesión tiene esto. Dices que sí a varios proyectos pensando que no saldrán todos y de repente empiezan a salir y se juntan. `Cómicos nuestros' es un homenaje a cómicos y cómicas españoles de los años 60 y 70 como Fernando Sancho, Gracita Morales, Lina Morgan, Fernando Esteso… `Anem per feina' (Vamos al grano) es un programa para conocer a personas que se han tenido que reinventar con la pandemia, cambiar de vida o de negocio, lo que me dio un chute de energía al ver cómo lucha la gente.

Y además `Ante todo mucha calma' en el Borràs.

Sí, está los sábados en el Borràs dentro del programa `La Casa de la Risa' junto a otros espectáculos como Albert Pla, Jordi Merca, Hotel Cochambre. Estoy encantado porque subirme a un escenario y poder contar mis tonterías a la gente es mi forma de no ir al psicólogo. Vuelvo a casa con la terapia hecha.

¿En lugar de calma no sería mejor una revolución?

Lo iba a titular `Ante todo asaltemos el Congreso', pero estoy esperando a ver cómo se va modelando la ley de libertad de expresión para no tener problemas (risas). Es surrealista que metemos a cantantes y artistas en la cárcel como está pasando.

¿Cómo nace `Ante todo mucha calma'?

En un espectáculo anterior hablaba de la locura de las redes sociales y me apeteció jugar con la ironía porque si ves el monólogo el primero que no está calmado soy yo porque rajo de todo. Quise jugar con una frase de `Siniestro Total', un grupo al que admiro, pero es verdad que no son tiempos de calma sino de rebotarse.

O sea que no es un tema de edad.

No qué va, además el riñón de mi hermana que es de L'Hospitalet va como Jordi Alba, como una moto. Es un riñón que va a 200 por hora. Me sigue gustando dar caña.

Hace años te inspiraste en un equipo de fútbol de barrio para hacer la serie `Pelotas'. El fútbol siempre acaba apareciendo en nuestras vidas.

En mi vida está bastante presente. Aunque a veces intento que no, es imposible así que lo asumo. Ahora me estoy chupando partidos de Segunda porque mi cuñado y mi hermana son pericos y yo les doy soporte moral. Espero que estén en Primera ya porque los partidos que vemos los fines de semana son un delirio.

¿Solo ves al Espanyol?

No. Yo soy de los que digo: No voy a ver la Copa del Rey hasta las fases finales, no voy a ver la Liga hasta los dos últimos meses, no voy a ver la Champions hasta cuartos… y al final me trago la fase de grupos con el AlcoyanoMadrid, Cornellà-Barça, toda la Liga… y de repente estoy leyendo que el Liverpool no puede jugar en Leipzig y tiene que ir a jugar en Rumanía y comentándolo con mi hijo. Total que sigue formando parte de mi vida. ¿Jugabas de pequeño?

Sí, me encantaba y si hubiera tenido facultades hubiera sido futbolista. Yo incluso iba a jugar con una sonda porque ya de pequeño me trataban en la Puigvert por mis problemas renales. Cuando estaba enfermo y me ponían la sonda me la pegaba con cinta aislante y me la escondía en el pantalón del chándal y me iba a jugar. Cuando se daban cuenta mis padres venían a buscarme y me llevaban para casa.

O sea que `pelotas' vino de ahí. Después de hacer `Tapas' buscamos algo que también tratara de la gente de barrio. Yo recordaba toda la gente que había alrededor de un equipo de fútbol de aficionados y sus historias y pensé que había un universo en el fútbol que me gustaba y de allí salió `Pelotas'. Aunque a mí me gusta el fútbol desde el minuto 1 al 90, las tertulias de después no las aguanto.

Implicaste a Julio Salinas y a Pichi Alonso.

Pichi Alonso porque es medio colega al ser amigo de una compañera de trabajo de mi hermana. Lo implicamos porque necesitaba un profe en un curso de entrenadores y él se estaba sacando el carné de entrenador, así que era perfecto. A Julio le conocí en un programa y como él es muy polifacético le ofrecimos un cameo. Los dos estuvieron encantados de la vida y además tenían mucha credibilidad y fueron buenos actores. Quizás mejor Julio que es muy `clown', Pichi es más serio.

Cómo ha cambiado el fútbol desde su época.

Solo hay que mirar los contratos. A mí me encanta hablar con gente del fútbol. Hoy en día hablar con jugadores del Barça, Madrid o Atlético es muy complicado porque no se puede acceder a ellos. Pero yo me he ido encontrando con gente en la vida como Míchel, Hierro, Guti, Quique Sánchez Flores y cuando hablo con ellos todos llegan a la misma conclusión de que ha cambiado mucho en 15 o 20 años. El juego prácticamente es el mismo pero todo lo que lo envuelve y todo lo que mueve ha cambiado muchísimo.

¿Te cambiarías por Leo Messi?

¡Ahora mismo! Solo por tener la sensación de marcar un gol. Yo me acuerdo de goles que marqué en el cole, es más, me acuerdo de los que fallé como alguno a puerta vacía. Cuando nos encontramos con los amigos nos acordamos de partidos de Liga del instituto. Imagínate si marco un gol en el Santiago Bernabéu en el último minuto. No sé si me cambiaría por Messi para toda la vida porque sería un problema para él, pero sí en algún momento determinado como cuando ganas una Champions. En los Mundiales me cambiaría por Maradona que es otro de mis ídolos.

¿Si solo pudieras elegir uno?

Maradona. Solo por esos dos goles ante Inglaterra en el Mundial de México 86, aunque luego intentaría vivirlo más calmado que Diego. Generacionalmente lo disfruté mucho y me parece ya no solo un jugador sino un personaje único. Es complicado de igualar.

De pequeño llegué a jugar a fútbol con una sonda pegada con cinta aislante y escondida en el chándal