«NO TIENE SENTIDO ABRIR UNA FÁBRICA DE BATERÍAS A DOS MIL KILÓMETROS DE DONDE VAS A PRODUCIR LOS VEHÍCULOS»
LUCA DE MEO HA PARTICIPADO EN UN ENCUENTRO VIRTUAL EXCLUSIVO CON LOS JURADOS ESPAÑOLES DEL CAR OF THE YEAR (ENTRE LOS QUE SE ENCUENTRA UN REPRESENTANTE DE PRENSA IBÉRICA) EN EL QUE HA REPASADO LA ESTRATEGIA DE FUTURO DEL GRUPO FRANCÉS Y LA IMPLICACIÓN DE ESPAÑA EN LA MISMA. LA ELECTRIFICACIÓN Y EL DISEÑO, COMO EJES CENTRALES DE LA POLÍTICA DE LA MARCA DEL ROMBO, HAN CENTRADO EL DEBATE.
La mano de Luca de Meo en Renault está empezando a marcar el ritmo de la orquesta. El máximo responsable de la marca del rombo está engrasando la maquinaria para devolver a Renault el vigor y la fuerza de antaño con nuevos diseños, más tecnología y una clara apuesta por la electrificación. De Meo emplazó a los jurados españoles del Car Of The Year en una charla llena de novedades y propuestas de futuro. Preguntado por el papel de España en la estrategia de la marca, De Meo reconoce que «para Renault se trata como de una segunda casa. Estamos muy orgullosos del trabajo que se está haciendo en Sevilla, en Palencia y Valladolid, creo que necesitan más trabajo y queremos ver nuevas posibilidades. Obviamente desde un punto de vista de competividad, algo que estamos discutiendo», en referencia a las negociaciones que reclaman mayor flexibilidad para adjudicar nuevos productos. La querencia de De Meo hacia España no es algo nuevo, «y de hecho aquí en Francia me dicen que estoy demasiado orientado hacia España». De Meo considera que «en nuestras plantas españolas tenemos muy buenos profesionales, un buen equipo, y lo que también necesitamos es que Sebastian Guigues (el director comercial de Renault España) vuelva a ser líder del mercado. Estamos hablando con los sindicatos y, la verdad, no veo que sea complicado que España mantenga esa posición importante», admite.
VUELVE EL R-5
En la reciente presentación del plan `Renaulution' De Meo sorprendió a propios y extraños con el anuncio del nuevo Renault 5, un prototipo de coche totalmente eléctrico. «No lo haremos con motor de combustión. Solo será eléctrico y llegará en el primer semestre de 2024, ere es el objetivo. Tenemos que acondicionar la planta y conseguir un proveedores que nos pueda asegurar suficiente cantidad de baterías cerca de la fábrica. Es un proceso complejo y largo, pero en tres años lo podemos hacer. Es un producto icónico de la marca y quería hacerlo aquí en Francia, aunque suponga un gran desafío desde el punto de vista de coste», explica el director general de Renault. Con este modelo la marca recupera la ilusión de un mito. «Personalmente habría presentado un SUV del segmento C, por temas de rentabilidad, pero no habría tenido el impacto que ha tenido este coche, con menciones en todo el mundo. Reemplazará al Zoe por un tema claro de reducción de costes, ya que no tiene sentido tener dos modelos en el mismo segmento», comenta De Meo a los jurados españoles. La idea es que sea «un coche de venta, de volumen. Estamos desarrollando esta plataforma eléctrica en el segmento B, y Renault siempre se ha caracterizado por ser una marca popular. Pero para democratizar el coche eléctrico tienes que venderlos con precios entre 20.000 y 30.000 euros, porque ahí está el presupuesto de la mayoría de la gente», admite. Para De Meo es importante con este coche «llegar a un nivel de costes que te permita ganar dinero, pero haciendo un coche que la gente pueda comprar. Un Zoe a más de 30.000 euros es un coche que vendemos bien por las ayudas, pero no es el precio de un coche del segmento B. Para democratzar el coche eléctrico lo tienes que vender entre 20.000 y 30.000 euros; ahí está el presupuesto del cliente. No quiero hacer un Mini Cooper John Cooper Works, quiero hacer un coche popular». El R5 es un coche icónico «aunque no tiene nada que ver con el anterior, pero hemos hecho guiños de diseño que lo recuerdan. Todas las marcas tenemos coches clásicos. Porqué no aprovechar ese tirón».
Para democratizar el coche eléctrico tienes que venderlo entre 20.000 y 30.000 euros; ahí está el presupuesto del cliente»
LA BATERÍA ES LA CLAVE
Con la importancia de disponer de baterías, la creación de fábricas en Europa es crucial. En 2018 De Meo ya sentenció que «Europa ha entregado el negocio de las baterías a los chinos», en un encuentro también con los jurados del Car Of The Year. Hoy la necesidad de producir las propias baterías es crucial y para ello Renault está estudiando diferentes opciones. La que tiene más futuro es la asociación con empresas como LG Chem y la startup francesa Verkor (con el apoyo de InnoEnergy y Schneider Electric). LG Chem, una de las que suena como candidata a entrar en Zona Franca para ocupar los terrenos de Nissan. Esa opción parece alejarse con la idea de Renault de concentrar la producción de coches eléctricos en el norte de Francia (en las plantas de Douai y Maubeuge). Para De Meo «no tiene ningún sentido trabajar en una fábrica de baterías si está a dos mil kilómetros de la línea de producción. Hay dos factores, uno es el tema logístico y el otro es el tema del impuesto del CO2. Si esto llega, las baterías son piezas pesadas que ocupan espacio. Será importante tener fábricas de baterías junto a tus fábricas de coches, y en países que son capaces de asegurar un mix verde en la producción de energía».
ESPAÑA ES HIBRIDACIÓN
En este sentido «es muy importante tener un coche de volumen para pensar en una fábrica de baterías. Y no hay previsión de producirlo en España. Lo que estamos mirando es concentrar toda la hibridación. También harán falta baterías, pero de otro tipo, ya veremos de dónde las sacamos». Luca De Meo admite que «una fábrica de baterías representa una inversión de dos o tres mil millones de euros, y no la hacemos los fabricantes de coches sino los proveedores. Y por eso debes tener un negocio asegurado con al menos una marca que produzca 300.000 o 400.000 coches. No haces una fábrica de baterías en la Pampa».
UNA GAMA RENOVADA
Con la nueva gama de productos 2023-2024 en las marcas del grupo, De Meo cree que «volveremos a un nivel de ingresos y márgenes decentes. Creo que la posibilidad que le daremos a Dacia de desarrollarse en el segmento C será importante en muchos mercados. Alpine será un nicho, pero no a nivel como hoy, sino que habrá tres modelos, dos de ellos en segmentos competitivos, todos serán eléctricos, y podremos crear valor». La suerte de De Meo en Renault es «que me han dado una hoja en blanco, me han dejado empezar desde cero, desarrollo de producto, distribución, el modelo, todo. Cada semana hay una nueva empresa china o de California
Daremos a Dacia la posibilidad de desarrollarse en el segmento C y será muy importante para atacar algunos mercados»
que sale al mercado y la valorizan tres veces más que a empresas como Renault, con más de 120 años de historia. Y estoy un poco harto de esto. Pues antes de que lo hagan otros lo hago yo. Hay que construir abandonando un posicionamiento nostálgico, crear una empresa de nueva generación».