Sueños y cicatrices
El día por fin ha llegado. La ida de octavos de final. El momento para saber de qué esta hecho este equipo. La hora de la verdad. El PSG de Pochettino mide en el Camp Nou la fiabilidad del Barça de Ronald Koeman
Hay pocas competiciones tan anímicas como la Champions. Europa acostumbra a desnudar a los equipos con miedo escénico o que arrastran viejos fantasmas. También a los que no están trabajados o se han dejado llevar por la inercia. Lo sabe bien el Barça, que tiene una herida abierta los últimos años, castigado por noches devastadoras en las que fue devorado por el colapso.
Pero también lo sabe muy bien el PSG, que vivió en sus carnes La Remontada en mayúsculas. Precisamente a manos de un Barça en el que estaba Neymar, el gran agitador del milagro aquel día, aunque la foto del partido se la llevara
Messi en medio de las gradas. Hoy no estará Ney, lesionado otra vez, pero sí Messi y quién sabe si Piqué tras una recuperación milagrosa. Necesita el Barça la jerarquía del central para reforzar la defensa. Pero, sobre todo, necesita su confianza. La que siempre se tuvo Gerard, uno de esos futbolistas que se hacen enormes en los partidos grandes. La decisión se tomará hoy mismo horas antes del partido. El que finalmente no estará es Araujo, que ayer ni se entrenó con el grupo.
SENSACIONES ENCONTRADAS El Barça llega al duelo con la sensación de que el partido le llega demasiado pronto. En el mejor momento de la temporada, pero en plena fase de crecimiento. Tanto es así que el PSG aún sigue siendo el favorito. Ellos fueron finalistas en la última edición. Y a pesar de no contar con Neymar ni Di María, sí estará Mbappé, la gran obsesión del Barça. Lo sabe Koeman: con espacios es un arma de destrucción masiva. Y también Jordi Alba, que ayer dio la clave para que el Barça tenga opciones de pasar a cuartos. “Tenemos que ser un equipo. Defender y atacar todos. Ser un equipo es vital en este tipo de eliminatorias y sobre todo en Champions”. Lo necesitará un Barça que ha encajado 10 goles en los últimos seis partidos. La última vez que el equipo dejó la portería a cero fue ante el Elche (0-2) el 24 de enero. Cuestionado sobre cómo se frena a Mbappé,
Koeman dio soluciones colectivas. “No soy partidario de hacer marcajes individuales. Cuando tengamos balón tendremos que estar bien organizados para cuando perdamos el balón”. El Barça tiene la oportunidad de desmentir uno de los mantras de la temporada: que no está listo para ganar a los equipos grandes.
LA FE DE KOEMAN Koeman fue el primero en reivindicar al equipo cuando todo era pesimismo tras el sorteo. Habló entonces de eliminatoria igualada. Y ayer, con un Barça más hecho que el de entonces, negó que
Messi y Pedri, sociedad ilimitada. La conexión entre los dos es una de las grandes noticias de la temporada //VALENTÍ ENRICH
no hayan sido fiables ante la máxima exigencia. “No he visto equipos mejores que el Barcelona hasta ahora. Lo único que no ha sido nuestro ha sido el resultado, pero son cosas que pasan en los partidos”.
Un buen resultado hoy (21.00 horas) podría ser el principio de algo. Un cambio incluso en la forma de encarar la temporada. El Camp Nou acoge un clásico de los últimos años. Y el Barça se encomienda a Messi y a
Pedri, el niño que le devolvió la alegría al `10', para soñar.