PRESIÓN A RAMOS
El capitán blanco ha decidido no hablar públicamente de su futuro mientras se recupera de su operación
El camero no piensa hablar de
su renovación mientras se recupera, pero el Real Madrid piensa en Pau Torres
Ha contactado con el Villarreal para tantear su disposición a negociar la venta de Pau Torres
El Real Madrid y Sergio Ramos están en pleno pulso para la renovación de contrato. Las posturas parecen en estos momentos irreconciliables, pero todo puede cambiar de aquí a final de temporada, cuando el camero quedaría libre. Nada nuevo que no se viviera en 2017, cuando ambas partes abordaron la última renovación. Entonces, el central utilizó al Manchester United para arrancarle a Florentino Pérez un jugoso contrato de 12 millones netos anuales. Ahora, el Real Madrid está presionando al capitán con posibles refuerzos para que renueve a la baja. Empezando por un supuesto acuerdo con el central del Bayern David Alaba, que llegaría con la carta de libertad, y acabando por los últimos contactos mantenidos por el director general, José Ángel Sánchez, con el presidente del Villarreal, Fernando Roig, para tantear su disponibilidad a ne
La falta de ofertas podría llevar al camero a aceptar la propuesta a la baja que le ha hecho Florentino
gociar la salida de Pau Torres. Roig informó al ejecutivo del Real Madrid que el central tiene contrato en vigor hasta 2024 y que su cláusula de rescisión había ascendido de 50 a 65 millones en virtud de algunas cláusulas estipuladas en su contrato, como el número de partidos disputados y su internacionalidad, condición que alcanzó en noviembre del 2019. El club blanco ve a Pau Torres como el sustituto de futuro de Ramos por su juventud, 24 años, y confía en que el club groguet acepte entablar una negociación que le permita rebajar su cláusula. Paralelamente, espera que estas negociaciones hagan que Ramos recapacite y acabe firmando su continuidad.
El central y Florentino se vieron las caras la pasada semana. Una reunión cordial tras la que decidieron tomarse un tiempo de reflexión. Siguiendo los consejos de su padre, Ramos ha decidido aparcar cualquier manifestación pública sobre su futuro mientras dure la recuperación de su operación de rodilla . La falta de las ofertas -la última, al margen del fútbol chino, fue la del United en 2017- podrían provocar un giro en la decisión inicial del capitán blanco. Hasta el punto de que estaría valorando la propuesta por dos años con una rebaja del diez por ciento que le ha planteado Florentino. Todo se decidirá en una última cumbre a la que ambos se emplazaron en su última cita.