Osasuna reina en el barro y huye del pozo
En un partido aguerrido, el tanto de Kike Barja permite a los rojillos poner más tierra de por medio con el descenso a costa de un Alavés que no levanta cabeza
No era una `final' pero sí uno de estos partidos que pueden marcar un punto y aparte. Lo fue para el Osasuna, no para el Alavés. Duelo aguerrido en Mendizorroza, con casi 40 faltas que impidieron ver un juego fluido y atractivo. Lo decidió una jugada aislada en el tramo final que castigó Kike Barja. Los de Jagoba Arrasate se alejan del descenso mientras que los del Pitu Abelardo no salen del bache y podrían caer en la zona roja. De los resultados de Valladolid y Elche dependerá. Hubo que bajar al barro en Vitoria. Cada disputa era una férrea lucha. Difícil ver así más de cuatro pases seguidos que generaran ocasiones manifiestas. Y es que no hay que olvidar que el miedo a perder también pesaba en la mente de los futbolistas. A partir de la línea de tres cuartos, poquito poquito. Justo antes del asueto llegaron las dos más claras para el Osasuna. Fue en la única visita a Pacheco. El meta se vio superado por Budimir pero Lejeune la sacó bajo palos y el rechace lo estrelló Calleri contra el pecho de
Laguardia. El mariscal de los babazorros se lanzó `a lo Puyol' y evitó que se alterara el electrónico.
Calleri, en otra de las pocas que pudo cazar, probó a Pacheco en la rea
Hasta 38 faltas hubo en un duelo que brilló por las férreas disputas y al que le faltó juego ofensivo
Kike Barja castigó en una de las pocas llegadas rojillas con el que fue su primer tanto en Primera División
nudación. Y de nuevo la nada. Un desierto de ocasiones. Sólo alguna jugada aislada donde la calidad individual fuera lo que se saliera de la ecuación. Y así fue. Se conjugaron Rubén García y Roberto Torres por la derecha y el centro del `10' lo transformó Kike Barja. Su primer gol en Primera. Feo de ver pero precioso para su equipo. Budimir atrajo a los centrales y Barja, que entró diez minutos antes, lo aprovechó. No hubo respuesta del Alavés. En el el descuento, en la primera que pudieron asociarse Lucas y Joselu, el ex del Newcastle ejecutó demasiado centrado. Nada más. El `efecto Pitu' brilla por su ausencia.