Los hijos de la guerra todavía rompen barreras
Tras muchos años luchando por su reconocimiento, Kosovo jugó su primer partido oficial en 2016
El 5 de marzo de 2014, Kosovo jugó por primera vez en su historia un amistoso internacional oficial. Aunque ni la FIFA ni la UEFA la reconocía por aquel entonces, aquel empate ante 17.000 personas en Mitrovica contra Haití marca un antes y un después en el fútbol de este país. Siete años después, se puede decir que esta joven selección va por el buen camino: los organismos internacionales la aceptaron en 2016, estuvo casi dos años sin perder entre 2017 y 2019 y se quedó cerca de clasificarse para la Eurocopa 2020. Tras su independencia en 2008, Kosovo sigue luchando por un reconocimiento internacional que le saque del bloqueo permanente. Su primer partido oficial no llegaría hasta septiembre de 2016, cuando empató 1-1 ante Finlandia en los clasificatorios para el Mundial. Berisha anotó el primer gol de la historia de la selección. Entre octubre de 2017 y septiembre de 2019 nadie fue capaz de derrotar a una selección que contaba con una mano sus años de vida. Entre medias, una Nations League en la que quedó primero, varios amistosos y algunos partidos de clasificación a la Eurocopa. Aquella racha se cerró cayendo por 5-3 ante Inglaterra.
En los clasificatorios para la Eurocopa 2020, Kosovo rozó lo que hubiese sido algo histórico. Luchó hasta la última jornada por una plaza y también disputó el play-off gracias a su gran Nations League. Los partidos, previstos para marzo de 2020, se retrasaron por la pandemia hasta noviembre. Ahí, la selección de Bernard Challandes llegaría mermada y cayó por la mínima ante Macedonia del Norte.
En solo cinco años, han rozado la clasificación para una Eurocopa y encadenaron casi dos años sin perder