Erling Haaland y Leo Messi ya lo saben
No estoy muy familiarizado con el mundo de la cacería, pero creo que lo que se esta preparando ahora mismo entre los mayores equipos de Europa es una montería a lo bestia para atrapar a las dos grandes piezas que existen en el fútbol mundial. Sin duda, la más codiciada es Haaland. El presidente Laporta sabe que tiene dentro del club un asunto muy importante que arreglar, la permanencia de
Messi. Una de sus más comprometidas promesas electorales es conseguir que el crack se quede y se retire de blaugrana. Pero también sabe que dependerá mucho del panorama deportivo que se le ofrezca para que tome esta decisión. Si mantenemos la mente fría, vemos que el Barça no es precisamente el cazador que sale más armado para atrapar a Haaland; se ha publicado que el Manchester City le ofertará 36 millones de euros por temporada. Esto es una barbaridad. ¿Puede permitirse el Barça apostar a sabiendas de que tiene pocos recursos? Me consta que el Real Madrid, al igual que otros clubes, irá también a por el jugador noruego. Sin embargo, ayer nos sorprendimos con la noticia de que Mino Raiola y el padre de Haaland estaban en Barcelona. No tengo ninguna duda de la capacidad de persuasión de Joan Laporta, en eso es único. Sin embargo, Haaland está en una edad y un momento de su carrera que lo que quiere es progresar deportivamente y, no nos engañemos, económicamente. Para él es el momento de dar el pelotazo de su vida. Y sabiendo que Raiola es un tipo al que le gusta contar billetes a manos llenas, la cosa para el Barça está bastante regular. “No-hay-dinero.” Eso nos dejó dicho el señor Tusquets, que es quien ha abierto la caja fuerte del club y ha hablado con las arañas que habitan en ella. Cómo me gustaría equivocarme, pero es mejor que vayamos pensando en ser realistas y nos contentemos con la llegada de jugadores jóvenes y talentosos, que no es poco. Ilusionémonos por la visita del señor Raiola pero lo justo, es mejor alegrarse con la idea más probable, que Messi finalmente se quede, y con la llegada de algún refuerzo, digamos eficaz, pero no estelar. Ya vendrán tiempos mejores. Además, de nada sirve ponerse nervioso porque, a lo mejor a estas alturas, tanto Haaland como Messi ya hayan tomado la decisión que les conviene.
La clave: me gustaría equivocarme, pero creo que debemos contentarnos con la llegada de jóvenes