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TRÁMITE EN EL PALAU

Con un inicio de partido prácticame­nte perfecto, el equipo que dirige Xavi Pascual dejó casi sellado su billete para la penúltima ronda de la Champions League

- DAVID RUBIO

El Barça de balonmano se impuso por 25-37 al Elverum en la ida de los octavos de final

de la Champions

En un partido especial, el FC Barcelona derrotó ayer al Elverum por 25-37 en la ida de unos octavos de final de la Champions que vivirán su vuelta el lunes a las 18.45 horas en el mismo escenario, aunque en esta ocasión con los azulgranas ejerciendo de locales.

398 días después de su victoria por 32-30 ante el Pick Szeged el 20 de febrero de 2020, el cuadro azulgrana volvió a disfrutar del apoyo de sus aficionado­s. Fueron tan solo 686, pero es un primer paso que los jugadores y el cuerpo técnico esperaban con ansiedad y lo disfrutaro­n como niños. Tras el acuerdo al que llegaron ambos clubs con el beneplácit­o de la EHF por las restriccio­nes contra el Covid que imperan en tierras noruegas, la eliminator­ia se disputa íntegramen­te en el Palau y lo cierto es que solo una hecatombe pasado mañana apearía de los cuartos a los vigentes subcampeon­es continenta­les.

SALIDA EN TROMBA Tras casi dos semanas sin competir por el aplazamien­to del duelo liguero ante el Recoletas Atlético Valladolid, la puesta en escena azulgrana fue sensaciona­l. Con una defensa perfecta en la que mandaban en el centro Ludovic Fàbregas y el `especialis­ta' Thiagus Petrus, el Barça maniató al cuadro escandinav­o y, con tres tan goles de Dika Mem, ganaba por 1-11 en el 12'. La irrupción de Thorsten Fries (10 paradas en la primera parte) permitió correr a un Elverum que, de la mano de su emergente pivote Thomas Solstad (seis goles sin fallo), suturó la herida y mantener esos 10 goles de desventaja (7-17 en el 23') e incluso irse a los vestuarios con 12-19 tras un gran tanto de Simen Pettersen en el cierre del primer tiempo. `LUDO', AL MANDO El segundo acto estuvo marcado por el intercambi­o de goles con Fàbregas como referente azulgrana. La inspiració­n de Alexander Blonz (un extremo izquierdo muy interesant­e incluso en clave azulgrana) y las paradas de Fries antes de lesionarse permitiero­n

El Barça derrotó con autoridad al Elverum (25-37) como visitante en el regreso del público al Palau

Los azulgranas ya ganaban por 1-11 en el 12’ y disputarán la vuelta el lunes como locales en el mismo escenario

al Elverum situarse 19-25 en el 43' tras un tanto de Pettersen. El Barça reaccionó apretando en defensa y Gonzalo volvió a hacer de las suyas (16 paradas para rozar el 40%), lo que frenó la remontada de los noruegos, locales ayer.

ÚLTIMO TIRÓN Con más piezas pese a las a de Casper Mortensen y de Aitor Ariño (cumplió el joven Àlex Pascual como único extremo izquierdo), el cuadro barcelonis­ta aprovechó para volver a acelerar el ritmo y `ahogar' a su rival. N'Guessan y un Blaz Janc que se encuentra como pez en el agua en ese juego a la contra lideraron un parcial de 1-6 para un Barça que llegó a ganar por 14 goles (23-27) antes de que Blonz y Pettersen cerrasen el duelo con sendos goles en el último minuto (25-37).

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EFE Casi 700 espectador­es dieron colorido y alma a un Palau en el que el Barça llevaba más de un año huérfano de su afición. En cuanto al partido, poca historia por la superiorid­ad azulgrana //
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