El gol también llega desde atrás
Cuatro defensas de la plantilla acumulan siete goles este curso superando las cifras del último año, cuando solo marcó Ignasi Miquel
Todos los goles cuentan. Vengan de donde vengan. Se había acostumbrado el Girona a depender de la puntería interminable de Cristhian Stuani, el encargado de tirar el carro en la faceta ofensiva. Justo cuando las cifras del uruguayo disminuyen, el equipo ha decidido volver a repartir el gol más que nunca. Y es aquí donde entran los defensas. Algo de lo más necesario para ir sumando puntos.
Sirvió de poco en Vallecas, pero Santi Bueno abría el marcador ante el Rayo el pasado sábado con un buen testarazo. Suma dos tantos este curso. El otro, en Copa ante el Lugo. No es el único defensa del Girona que ha visto portería esta temporada. Bernardo también acumula un par de dianas, las mismas que Enric Franquesa.
Completa la estadística Yan Couto, con un gol.
Son siete, entre todas las competiciones, los tantos que han marcado los defensas de la plantilla. No lo ha logrado Juanpe Ramírez, con escaso protagonismo por culpa de las lesiones. Tampoco Ramalho, que vistió de rojiblanco durante la primera vuelta antes de salir cedido a Osasuna. Ni Jordi Calavera o Antonio Luna.
Suficiente para mejorar los números de la última temporada, en la que apenas marcó Ignasi Miquel y lo hizo en la Copa, ante el Cartagena. También se superan los registros de la anterior. Todavía en Primera, el año del descenso, la defensa firmó tres tantos, obra de Bernardo, Pedro Alcalá y Ramalho. Mucho más partido se le sacaba a la estrategia en Segunda y sobre todo con Pablo Machín en el banquillo. Los defensas marcaron 10 goles en las temporadas 16/17 y 15/16, mientras que fueron hasta 15 en el ejercicio 14/15, el techo de esta época más reciente del club en el fútbol profesional.
La temporada del descenso, la defensa marcó tres tantos, obra de Bernardo, Alcalá y Ramalho