“Si Chuso disputa sus octavos Juegos con 51 años, sería como una medalla”
Reelegido sin oposición para su segundo mandato el pasado diciembre, el extriplista internacional repasó los nuevos retos que afronta el atletismo español y comentó las principales aspiraciones de subir al podio en la aplazada cita olímpica de Tokio
¿No se presentó nadie porque lo está haciendo muy bien?
El atletismo quería una evolución tras la etapa de Odriozola. No es solo la competición. Hay una producción audiovisual para atraer a aficionados, atletas... La gestión responde a un plan estratégico de 80 páginas. Y hemos respondido con una idea clara de desarrollo. Creo que la valoración general es muy positiva. Quizá eso hace que un candidato tenga apoyo o que no se genere la necesidad de un cambio.
¿Será su último mandato?
Yo pienso en estos cuatro años. Si hablo de otros cuatro perdería el foco. Mi primera decisión en diciembre de 2016 fue limitar los mandatos a tres consecutivos. Lo entiendo como una convicción personal. No puedes estar 20 años por el desgaste personal y de mi equipo. Cada cierto tiempo es bueno un estímulo. Hay muchas obligaciones y son 24 horas gestionando. Si no piensas en el mañana el atletismo se va muriendo.
¿Cómo han tenido beneficios en la temporada del covid?
En ese sentido tuve cierta visión. En marzo hicimos un plan de choque económico para salvaguardar las finanzas de 2020. Estimulamos el sector para que no bajase la actividad. Desde marzo hemos trabajado en protocolos para volver a los entrenamientos y en cuanto pudimos, para volver a la competición. Otro gran reto fue la ayudar a la preparación de los deportistas de máximo nivel. Después hicimos un gran esfuerzo económico en el peor momento para acercar el atletismo con `streamings' de calidad y alcanzamos los seis o siete millones de contactos. ¿De qué está más orgulloso? Quizá de esa visión global. Nos dimos cuenta de que 2020 era el momento y que había llegado más deprisa por las circunstancias. Esto nos obliga a hacer una apuesta valiente en estos cuatro años para transformar los pilares del atletismo. Si en las competiciones no se ve la entrega del equipo nacional, la gente no se engancha. Está todo interconectado y es importante demostrar que somos capaces.
Y esa garra la representa a la perfección Óscar Husillos... Fue campeón del mundo en Birmingham unos minutos tras bajar de 45 segundos, fue plata en el Europeo tras el noruego
(Warholm) y ahora ha ganado el oro. Es la vez que llegaba más corto de forma, pero con más necesidad. Corrió con determinación. O muero o me quedo sin nada. Volvió a ser Husillos. Más allá de las medallas el equipo es muy competitivo. Asier, Daniela, Lucía, Ana o Esther Guerrero y su valentía.
¿La única opción real de medalla en Tokio es Orlando Ortega? Es la más clara. Aparte de su plata en Río, ha ganado dos veces la Diamond y es difícil que baje del tercer puesto, aunque ahora lleva tiempo con molestias por un golpe en un pie. Sin olvidar a Ana, por supuesto. Es una `killer', ya estuvo en la final de Doha y fue bronce en el Mundial de pista cubierta. Y la marcha está a muy bien nivel, pero con una climatología tan dura y con una humedad tan altísima será muy complicado. En el 20 hay más opciones. Doha es una referencia y acabamos con una plata (Ortega en 110 metros vallas), ocho finalistas y 16 semifinalistas.
¿Hay que fijarse en los semifinalistas en Mundiales y Juegos? El atletismo es mucho más global que en los 90. ¿Quién va detrás de Estados Unidos en el medallero? Kenia, Etiopía, Uganda, Jamaica, Botswana... los países más pobres, que es algo que no pasa en ningún deporte. Por eso el valor de la medalla es enorme.
Sin olvidar las medallas...
Claro. Son importantísimas, porque el deporte se basa en eso. También hay que analizar cómo compites dentro de tu nivel. Esto no es un equipo. Aquí uno se entrena en Murcia, otro en el CAR, otro en Burgos, otra en Guadalajara. No hay un comportamiento global. Estos años hemos sido tremendamente valientes, aunque nuestra realidad es una en el ámbito mundial y otra en el europeo.
¿Qué le parece lo que dijo Eufemiano de Fermín Cacho?
No conozco a este señor y no voy a valorar lo que haya podido decir. ¿Pero ha hablado con Fermín?
Claro. Lo conozco desde que tenía 14 años. Es como si yo te acuso de algo sin pruebas. Lo llamé y está cada vez mejor. Lo arropa mucho su familia. Que cada uno saque sus conclusiones. El atletismo ha sido siempre claro sobre este señor. ¿Qué supondría que un atleta de 51 años como García Bragado dispute sus octavos Juegos?
Lo primero, que nadie lo ha logrado y eso ya define esta hazaña. Tiene una oportunidad clarísima. Sé que le quedan pocas balas y ahora debe decidir si va a la Copa de Europa. Siempre se recordaría que participó en sus octavos Juegos con 51 años. Sigue con la misma ilusión y si al final lo consigue para mí sería la primera medalla de España en Tokio.
Orlando es la opción más clara de medalla sin olvidar la marcha ni a Ana Peleteiro
Llamé a Fermín y está mejor. Es como si yo te acuso de algo sin ninguna prueba