Messi volvió a dar un gran recital
Pasa el tiempo y el Barça sigue agarrado a Leo, incombustible, efectivo y fiable. Estuvo de `10' y fue clave para una victoria imprescindible
Leo Messi dio una nueva lección de fútbol. Estrelló un balón en la parte inferior del travesaño, marcó dos goles, dio una asistencia y dejó que Griezmann anotara el penalti con el que fue sancionado el Getafe en el minuto 90+3. Su influencia fue decisiva para que el FC Barcelona restara un partido y esté ahora a siete victorias del título. El capitán, con esta actitud, acierto y ganas, es toda una garantía de éxito para alcanzar el objetivo final.
IRREEMPLAZABLE El rosarino fue el alma del equipo. Seis de los ocho remates a puerta fueron suyos y redondeó el partido con una asistencia a Araujo para el 4-2, a la salida de un saque de esquina. Además, en el último suspiro del encuentro, fue generoso al brindar el lanzamiento de un penalti a Griezmann cuando el equipo tenía una ventaja de dos goles y no quedaba tiempo para más. En otras palabras, que si lo hubiera fallado, como el último que ejecutó ante Keylor Navas, en el PSGBarça (1-1) del 10 de marzo, el error hubiera sido intrascendente. Igualmente, cediendo el disparo al francés, se cerró las puertas a firmar el que hubiera significado su primer hat-trick de la temporada, pero al mismo tiempo reforzó la segurirdad del galo en este tipo de jugadas dado que erró la última que lanzó con el Barça (contra el Betis
Marcó dos goles, dio una asistencia, estrelló un balón en el travesaño y regaló el penalti a Griezmann
en la primera vuelta) y con la camiseta de la selección de su país. Messi, por otra parte, con el doblete de anoche, superó la marca de goles de la pasada temporada (31) y se eleva ya a los 33 a falta de siete partidos. Además, es más pichichi con 25 dianas, las mismas que firmó el curso 2019-20. Desde el ejercicio 2009-10 (con el actual ya son 12) ha marcado 25 o más goles en el torneo doméstico. Brutal. Otra curiosidad que dejó el partido la encontramos en el primer gol del capitán, el 1-0 en el minuto 8: fue su tanto más `diabólico' al ser el 666 como azulgrana. Sin embargo, poco tiempo dio a los amantes de las cábalas esotéricas y, en el 33, pasó página con otro tanto, el 667 en 772 partidos.