El `Submarino', ¡a la final! Cavani y De Gea arreglan el trámite
El equipo de Unai Emery hizo bueno el 2-1 de la ida y arrancó un 0-0 en el Emirates que certifica el pase a la primera final europea en la historia del club El Manchester United hizo buena la goleada de la ida y selló su pase a la final de la Europa Leag
El fútbol a veces da una segunda oportunidad. Y hasta una quinta. Recordaba Pau Torres recientemente que en 2006 acabó llorando en la grada de El Madrigal cuando Lehman paró aquel imborrable penalti a Riquelme. Quince años después, y tras cuatro intentos fallidos, el Villarreal jugará la primera final europea de su historia.
El cuadro `groguet' hizo bueno el 2-1 de la ida en un partido titánico, un derroche coral que llevó a sus hinchas al borde del infarto. Con dos tiros al palo de Aubameyang. Pero el `Submarino' resistió. Controló el primer tiempo y supo sufrir en el segundo para amarrar un 0-0 que el 26 de mayo lo llevará hasta Gdansk para medirse al Manchester United.
VELADA ÉPICA
Emery casi calcó el once de la ida, pero la duda no era tanto la forma como el fondo. Si el de Hondarriba saldría a ser protagonista con el balón o a replegarse, lo que en la ida permitió resucitar al Arsenal. Bastaron cinco minutos, lo que tardó Leno en despejar una comba endiablada de Chukwueze -lesionado sobre la media hora-, para comprobar que el Villarreal iba a ser fiel a su estilo. Valiente. Salió a morder a los centrales, obligados a rifar el balón. Arteta colocó a Thomas como ancla con cinco hombres, toda la pólvora, en campo rival. Pero el Villarreal estaba cómodo. Sobrio en la salida, con Parejo al mando, y solidario en la presión. Un esfuerzo coral que impidió al Arsenal correr o activar a sus estrellas. Aun así, Aubameyang pudo abrir la lata en un tiro al palo y otro que casi se comió Rulli.
Tras el descanso, dos sustos más de Pépé y Smith Rowe. El Arsenal iba a más, pero el Villarreal supo enfriar el duelo. Tener el balón y que corrie-
El Villarreal mandó en la primera parte gracias al control del esférico y su agresiva presión defensiva
Aun así, Aubameyang tiró al poste antes del intermedio y los errores de Rulli pudieron salir caros
Los `groguets' acabaron encerrados y pidiendo la hora tras un remate al palo de Aubameyang en el 79'
El Manchester United cumplió con el expediente en Roma. La goleada de la ida requería un milagro imposible para los italianos, que Cavani se encargó de enterrar. El uruguayo ha sido el hombre de la eliminatoria, con cuatro goles en dos partidos. Mención aparte merece De Gea en la vuelta. El meta español fue clave para evitar a los de Solskjaer un sufrimiento innecesario. Fue la Roma quien capitalizó la mayoría de las ocasiones. 17 tiros registraron los transalpinos, y en varios de ellos forzaron a De Gea a sacar su mejor repertorio. Lo intentaron en el primer tiempo Roger Ibañez, Pedro y Mkhitaryan. Todos chocaron contra el muro español. En el otro lado, en cambio,
Edinson Cavani tuvo dos ocasiones y metió una. El uruguayo no perdonó en un contragolpe lanzado por Bruno Fernandes, facilitado por la mala defensa de
Ibañez y finalizado por el propio charrúa.
Solskjaer se permitió el lujo de rotar, dando entrada a Van de Beek o Bailly en el once. Y prosiguió en la reanudación dando entrada a Telles y Williams, pero casi lo paga caro. La Roma reaccionó con dos goles en tres minutos, obra de Dzeko y Cristante. El United desapareció del césped. Sólo quedó
De Gea para salvar hasta tres ocasiones clarísimas para los de Paulo Fonseca.
La advertencia hizo despertar a
Cavani, que volvió a asociarse con
Bruno para sentenciar el partido. Esta vez centró el portugués, y el Matador cabeceó a la red con maestría, puro delantero entrando desde el segundo palo. En el tramo final la Roma en un golpe de orgu
Tras el segundo gol de la Roma, el United se borró del césped y solo el meta español salvó al equipo
llo marcó el tercero a través de Zalewski. Salvaron el honor y se quedaron con el triunfo, pero no evitaron que el Manchester United vuelva a la final de la Europa League cuatro años después de ganarla.