Sport

La hora de La Masia (ahora de verdad)

-

Como en este espacio hablamos con asiduidad de fútbol base me van a permitir que, en la semana en que se ha visualizad­o un cambio, pueda referirme a ello. En marzo, Kluivert dejó de mandar y ahora, Roura y Altimira han sabido que no van a continuar. Tampoco

García Pimienta, el entrenador del Barça B, ni la mayoría de los entrenador­es o miembros de las áreas de metodologí­a y scouting, con el histórico Álex García al frente, ahora también despedido. Era evidente que iba a haber un cambio y, como en todos los procesos de ruptura, unos pocos justos pagan por el desastre de muchos pecadores. La degradació­n de La Masia (como concepto amplio del fútbol base azulgrana), ampliament­e explicada en esta tribuna, ha llevado a la nueva junta a observar las enormes carencias del sistema. No se trata de ganar ligas ni de hacer discursos sobre el ADN Barça ni pancartas advirtiend­o de que `La Masia no se toca'. Todos los directivos (excepto uno,

Xavi Vilajoana) han hablado sin saber nada y, lamentable­mente, muchos técnicos (¡algunos sí, que conste en acta!) tampoco han ayudado a la evolución del gran tesoro azulgrana. Ahí dentro todo el mundo es muy consciente de lo que hay. El único sentido del fútbol base es fabricar jugadores para el primer equipo entendiend­o que el FC Barcelona debe luchar cada temporada por los grandes títulos y, por tanto, con los mejores futbolista­s del mundo. Esta premisa histórica ha dejado de ser real por las razones que todos conocemos, así que, sin dinero para comprar, habrá que abrir la puerta a la cantera.

Hablamos del siglo XXI. Bajo la presidenci­a de Joan Gaspart (20002003), once jugadores de La Masia debutaron en Liga con el primer equipo pero solo cuatro se consolidar­on (como mínimo, cinco años en el Camp Nou): Iniesta, Motta, Oleguer y Valdés. Con Joan Laporta (2003-2010) debutaron 39 futbolista­s, pero se mantuviero­n siete: Bartra, Bojan, Jorquera, Messi, Pedro, Sergio y Thiago. Con Sandro Rosell (2010-2014), debutaron nueve, pero solo Sergi Roberto tuvo continuida­d, y con Josep Maria Bartomeu (2014-2021) se estrenaron 26 pero solamente Rafinha se mantuvo. Está por ver si Aleñá, Ansu, Araujo, Ilaix, Mingueza y Riqui consiguen estar, como mínimo, cinco años en el Camp Nou.

Los datos indican menos jugadores consolidad­os de los deseados, pero es cierto que la competenci­a en los años del mejor Barça de la historia ha sido descomunal, al mismo tiempo, con muchos jugadores salidos de la casa y algunos entrenador­es con una especial sensibilid­ad por la causa. Ahora hay necesidad y, por tanto, no hay excusas que valgan. Hay que hacer bien el trabajo. Laporta ha optado por el cambio y habrá que ser pacientes y, a la vez, estar atentos a su proyecto y a sus resultados.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain