El Barça se lleva el primer asalto
El conjunto azulgrana firmó un partido muy serio e inteligente en Stamford Bridge con una exhibición de Caroline Graham Hansen, autora del único tanto del duelo. Tocará rematar el trabajo, el jueves, en el Spotify Camp Nou
Golpeó primero el FC Barcelona en las semifinales de la Women's Champions League.
Graham Hansen, en tierras del `Sweet Caroline' como himno no oficial del fútbol inglés, decidió el partido en Stamford Bridge con un golazo marca de la casa.
Se presentó Jonatan Giráldez con un once de gala y con la carta de Geyse. Emma Hayes, sin embargo, sorprendió con su alineación. Defensa de cinco, con Charles de lateral zurda, Cankovic de mediapunta y la joya Lauren James, en el banquillo.
La primera acción del partido fue la metáfora de la propuesta del Chelsea: un balón largo para Sam Kerr para tratar de ganar la espalda a la defensa azulgrana y hacer daño a través de las transiciones. La intensidad por parte de ambos equipos y el choque de estilos marcaron los primeros compases y
Mapi León y Rolfö cortaron dos acciones peligrosas de las inglesas.
TODO AL `10' Pero fue el Barça quien logró adelantarse. Un golazo de Graham Hansen para abrir el marcador. Arrancó la noruega por `su' banda derecha, diagonal hacia el interior y disparo directo al fondo de las mallas para desatar la euforia de los culés. Un tanto muy parecido al que anotó, hace justo un año, en la ida de las semifinales contra el Wolfsburgo en el Spotify Camp Nou.
TOMA Y DACA Buscaba el Chelsea el empate con su plan de partido tatuado en la cabeza. Contras, transiciones y balones largos para Guro
Reiten y Sam Kerr. Paños, Paredes, Mapi y Bronze, providenciales en defensa y con la ayuda de las centrocampistas, lo evitaron. La extremo noruega, que en esta ocasión acompañaba a la australiana en la punta de ataque, logró batir a Paños tras un pase de la muerte de Kerr pero el gol no subió al marcador por fuera de juego. Al Barça le costó generar ocasiones tras el gol, a pesar de estar haciendo un partido muy serio. Walsh -fantástica en las recuperaciones para reiniciar los ataques-, Patri -que dirigía a sus compañeras- y Aitana -con un doble o triple marcaje sobre ella- ponían la calma desde el centro del campo.
Geyse ejercía una presión asfixiante a la defensa rival; Hansen y Rolfö eran un puñal por las bandas. Pero era difícil encontrar espacios en el área con el `autobús' que había plantado Hayes.
SERIEDAD E INTELIGENCIA Tras el descanso, ambos equipos bajaron un punto la intensidad y los dos técnicos buscaron agitar el partido con cambios. James aportó desborde y frescura para el Chelsea y Mariona reforzó el centro del campo para las azulgranas.
El guion fue prácticamente el mismo que en el primer tiempo, sin grandes ocasiones para ninguno de los dos equipos, pero el Barça mejoró y firmó una gran segunda parte, muy seria e inteligente.
Giráldez dio con la tecla con un cambio táctico en la forma de presionar y Salma, más pegada a la banda, dejó más espacios para que
Aitana pudiese moverse. Solo sufrió el conjunto azulgrana en los balones largos. Pero Paredes y Mapi no dejaron pasar ni uno. La mala noticia: Bronze se retiró lesionada, con molestias en la rodilla y sin poder apoyar la pierna, aunque luego se sentó a la grada con el resto de sus compañeras y ya andaba mejor.
SATISFECHAS Un remate de Torrejón se estrelló contra la madera y Berger salvó el tanto de Rolfö en los minutos finales. Las azulgranas se llevaron el primer asalto en Stamford Bridge y se quedó, aunque la tuvo para hacer el segundo, satisfecho con el partido a nivel coral. Se les pedía un partido sólido fuera de casa en Europa y lo controló perfectamente. Eliminatoria abierta y en el Spotify Camp Nou se decidirá quién se hace con el billete a Eindhoven.