Alarma: Modric, roto
Mala noticia para los blancos, que pierden al croata cuando se juegan la temporada con la final de Copa ante Osasuna y ante el City
El Real Madrid defiende el segundo puesto ante un Almería que lucha por evitar el descenso
Ancelotti pierde al croata, pero vuelven Benzema y Courtois, y Rubi plantea blindarse en defensa
Con la cara colorada tras la dura derrota en Girona, el Real Madrid vuelve a su estadio para jugar otro partido de una Liga que solo le interesa para preparar la final de Copa y las semifinales de Champions. Dos citas clave ante las que Ancelotti se hace cruces tras conocerse la lesión de Modric, al que pierde para el momento más importante del curso. El parte médico habla de una lesión en la cara posterior del muslo de la pierna izquierda, un percance que, como mínimo, aparta al croata de la final de Copa contra Osasuna y de la ida de las semifinales de la Champions contra el Manchester City, un encuentro en el que Ancelotti tampoco podrá contar con el sancionado Militao. Esta noticia preocupante contrasta con otra positiva al recuperar para hoy a Benzema y a Courtois, el que mete los goles y el que los para y que han sido las piezas clave en el entramado del italiano.
DOS CARAS Otro tropiezo madridista en la Liga provocaría una situación delicada en un equipo que tiene dos caras, el irregular de la Liga y el centrado en la Copa del Rey y en la Champions League. Además, si pierde pondría en bandeja al Atlético el segundo puesto, que sería el premio de consolación que les queda a los dos en la competición de la regularidad.
A esto se suma la preocupación de Ancelotti en su misión de intentar que sus mejores jugadores lleguen preparados ante Osasuna y City, pero antes tiene que salvar los partidos contra el Almería y el del martes en Anoeta ante la Real Sociedad. Dos pruebas que le obligarán a hilar fino en la elección de los once titulares evitando sobrecargas, lesiones o esas fatigas musculares que tan de moda ha puesto Benzema esta temporada. La baja de Modric es otro ejemplo.
BLINDAR LA DEFENSA Rubi, por su parte, llega sin Babic, sancionado, y Bilal lesionado. El técnico de Vilasar del Mar se plantea cambiar el dibujo para poner cinco defensas y frenar el ataque de un rival que se colapsa cuando los contrarios se parapetan en su área. La falta de un delantero centro que fije a los centrales les facilita el trabajo de ayudar a los laterales. Y lo hacen por la falta de amenazas en su área, que es un desierto cuando los blancos atacan.
Da lo mismo que el Real Madrid sea el equipo más goleador de la Liga, que en los días en los que tiene que demostrarlo se colapsa ante riva
les ordenados y defensivamente disciplinados, algo que se va a encontrar con Osasuna y, seguramente, con el City, que intentarán no dejarle correr y aprovechar los espacios, su mejor arma para sorprender.
FINAL ANTE EL ELCHE El entrenador del Almería tiene claro que su final la juega en su estadio el martes ante el desahuciado Elche. Rubi debe reservar armas para ese partido. Ante los blancos intentará nadar y guardar la ropa para intentar sorprender y llevarse algo positivo que tanto necesitan. Se espera que plante una muralla para negar los espacios a los de Ancelotti. Por eso podría reservar a cuatro jugadores de peso que están apercibidos: Luis Suárez, Samu, Puigmal y Melero.
AFINAR LA MÁQUINA A Ancelotti le quedan dos pruebas en la Liga antes de esas finales. Seis puntos para defender la segunda plaza sin que afecte a su preparación para la semana que viene. El italiano seguirá alternando titulares con suplentes. Los Courtois, Camavinga, Valverde, Benzema y Vinicius,
con los Lucas, Rudiger, Ceballos o Asensio. El objetivo es tener a todos a punto por si los necesita, y además tiene que encontrar relevo a Modric que le dé al equipo algo similar a lo que le da el croata.