El United firma una victoria de oficio
Los de Ten Hag trataron de matar el duelo por la vía rápida pero el Luton recortó distancias y resistió hasta el final
Manchester United sacó adelante un triunfo de oficio gracias a la actuación de la dupla HojlundGarnacho, que prácticamente sentenció el choque a los 7 minutos. Sin haberse sentado, los aficionados del Luton presenciaron como la tormenta de los ‘red devils’ arrasaba Kenilworth Road. No pasó ni el primer minuto que Garnacho y Hojlund empezaron a hacer de las suyas. El danés sorteó de maravilla a Kaminski y selló el primer gol del duelo. Al conjunto local, incrédulo por haber encajado con tanta rapidez, no le dio tiempo a reponerse que volvió a ver perforada su portería bajo la batuta de los mismos protagonistas. Tras el rechace procedente de un saque de esquina, Garnacho recogió el testigo y probó un disparo que acabó en una asistencia inesperada para Hojlund, que remató con el pecho. También pudo ampliar la brecha Marcus Rashford. El inglés abrió las aguas y condujo hasta probar el disparo a puerta. Si bien la superioridad con el 2-0 era aplastante, el Luton replicó y tras un disparo de Chong, el rechace lo aprovechó Carlton Morris para recortar distanEl cias a trompicones en el 14’. Minutos después, el mismo Morris estuvo cerca de sellar el empate en dos ocasiones: con un disparo desde la frontal y provocando una falta peligrosa. Antes del descanso, Casemiro se jugó la expulsión con una entrada a Barkley y Doughty se precipitó en una acción en la que se quedaba solo frente a Onana. Llegado el segundo tiempo, Garnacho recibió en banda, pero le faltó convicción y la zaga del Luton Town corrigió a tiempo.
Con el encuentro roto, los locales se apresuraron por asediar a Onana y el Manchester United respondió con internadas, comandadas por un imparable Rashford. Asimismo, Garnacho se mostró impotente al ver cómo se le escurría el gol de la tranquilidad, igual que a Bruno Fernandes. Ya en el último suspiro Onana salvó la victoria con una fuerte manopla.
HOJLUND SORTEÓ A KAMINSKI PARA PONER EL 0-1 Y REMATÓ A GOL CON EL PECHO UN DISPARO DE GARNACHO EN EL SEGUNDO TANTO