Las Guerreras ya rozan los Juegos
En una de las mejores actuaciones colectivas de los últimos tiempos, las de Ambros Martín dieron un paso de gigante hacia la gran cita olímpica parisina
A veces excesivamente denostados en el cruel mundo del deporte, los entrenadores tienen gran parte de culpa de los éxitos de sus equipos y eso es lo que sucedió ayer con las Guerreras y con Ambros Martin. El pasado 8 de diciembre, España sufrió una dolorosa derrota por 30-22 ante República Checa en el pasado Mundial en el principio del fin en la segunda fase. Apenas cuatro meses después y con solo dos semanas de trabajo, el canario ha sabido liderar la preparación exhaustiva del partido con el resultado que se vio ayer: una exhibición ante las checas.
El 21-31 con una excelente imagen colectiva con mención especial para la zaga (enormes Lara González y Shandy Barbosa) y para el partidazo de Jennifer Gutiérrez en ataque (6/8) dejan a España muy cerca del sueño de los Juegos e incluso el objetivo podría sellarse hoy.
Para ello fue necesario que Países Bajos reaccionase al 0-5 inicial ante Argentina gracias al talento de Malenstein y a los amagos con el 5-1 defensivo y Dulfer con sus gigantescos brazos como avanzada. Al final, 34-22 pese al susto inicial.
Las cuentas son claras. Si las neerlandesas vencen a Chequia hoy a las 18.30 horas y las Guerreras derrotan a la albiceleste a las 21.00 horas, el partido del domingo entre ambas selecciones sería una gran fiesta olímpica. De todas formas, la victoria española sería sinónimo virtual de clasificación salvo que Chequia venciese a Países Bajos por una cifra cercana a las dos decenas.
“En el deporte no siempre se repite la historia y hemos trabajado mucho en este partido desde la derrota en el Mundial”, afirmó un satisfecho Ambros tras la victoria.
Ese trabajo permitió convertir a una sensacional jugador como Jerabkova en un juguete a merced de la defensa. La clave llegó en el ecuador del primer tiempo, cuando se pasó del 6-7 al 6-12 con Mireya González en plan estelar. A partir de ahí, la renta no paró de crecer y al descanso ya era de nueve goles (10-19). Ambros pudo rotar a sus mejores piezas y todas las que salían del banquillo respondían. “Si volvía a la selección era por la ilusión de ir a los Juegos”, dijo Shandy Barbosa. Aún no se ha logrado, pero está tan cerca...