¡OLVIDATE DELA BARRA!
Pocas estructuras corporales influyen tanto en tu figura como unos hombros fuertes y bien desarrollados. Con este artículo, nos vamos a asegurar de que cuando te quites la camiseta no te duelan los hombros… y de que deslumbres a todos.
Mira, hablemos claro: si quieres “romper” tu silueta de verdad, observar miradas fugaces al quitarte la camiseta o escuchar varias veces al día eso de “¿estás entrenando, no?”, ya sabrás que unos hombros anchos y redondos son un requerimiento imprescindible para darte esa figura de V desde tu pectoral hasta tus trapecios. Y entonces, ¿qué haces?: empiezas a levantar cada vez más peso en busca de unos hombros de ensueño. Pero hay un problema, te pasas todo el día encorvado sobre tu ordenador y tienes la misma movilidad que una cuchara. Peor, tienes unos hombros machacados debido a un entrenamiento desequilibrado y un par de lesiones antiguas. Tus hombros necesitan crecer pero cada vez que coges la barra y haces press parece que alguien te esté clavando agujas. Es hora de prevenir el dolor y la debilidad de tus hombros a la vez que construyes dos bolas fuertes y saludables.