Fargo. Ewan McGregor protagoniza la tercera tanda de la serie
Con una transformación física que requirió de una dieta especial y varias horas de maquillaje, ha afrontado el desafío sin miedo.
Con los hermanos Coen en la producción, Fargo ha pasado de ser la adaptación televisiva de la película de 1996 a una de las series más premiadas y elogiadas de los últimos años. La tercera temporada, que volverá a contar con la nieve y la policía como señas de identidad, mantiene también el suspense y el humor negro que la ha caracterizado desde su debut en 2014, pero con la novedad de que los diez nuevos episo- dios tendrán un doble protagonista, pero interpretado por un único actor: Ewan McGregor ( Moulin Rouge), que debuta en televisión cogiendo el testigo de Martin Freeman y Patrick Wilson.
La cultura del selfie
La trama se sitúa en el pueblo de Eden Valley en 2010, cuatro años después de los sucesos ocurridos en la primera temporada, y hará hincapié en las nuevas tecnologías y la ‘cultura del selfie’: “Me gusta la idea de ver cómo personas tan humildes se desenvuelven en esta cultura del narcisismo”, explica Noah Hawley, uno de los creadores más interesantes de EE.UU. “La historia va a estar conectada con la primera entrega, del mismo modo que aquella estaba con la película. Es divertido que la gente sea capaz de establecer esas conexiones”.
A diferencia de las anteriores, habrá menos personajes y se centrará en el conflicto entre los hermanos gemelos Stussy, interpretados por el actor escocés. Por un lado será Emmit, un magnate inmobiliario atractivo y seguro de sí mismo, y, por otro, dará vida a Ray, calvo, gordo, en libertad condicional y siempre a la sombra de su hermano, al que culpa de que todo le vaya mal. Su rivalidad empezará con robos y terminará con asesinatos y relaciones con la mafia.
Para el actor, lo más complicado ha sido imitar el acento de Minnesota. “Es muy extraño y me resulta difícil por no ser norteamericano, y eso que en una ocasión tuve que hacer de holandés”, confiesa el escocés. “Y una vez que conseguí el acento debía encontrar la voz propia de Ray y Emmit para que no fueran la misma”, concluye.
Un gran postre
La aventura televisiva de Ewan McGregor comenzó gracias a un postre. “Me senté en un restaurante con Noah para hablar de los personajes y sugerí que debía llevar prótesis debajo de la barbilla. Él me mi-
ró con una cara como diciendo: ‘Ewan, tienes que engordar’. Así que me pedí un gran postre y estuve comiendo todo lo que quise de octubre a enero”. Una trasformación física que se verá en el primer episodio, donde Ray se toma un baño con su novia Nikki Swango (Mary Elizabeth Winstead).
No sabe cuántos kilos ganó, alrededor de unos cin- co, pero para interpretar a Emmit, que no tiene sobrepeso, llevó una camiseta especial para comprimir su cuerpo y cada día tenía que aguantar dos horas y media de maquillaje.
Junto a él estará Carrie Coon, la jefa de policía Gloria Burgle, que no guardará relación con los Solverson, la hasta ahora familia de policías protagonista.