Derechos.
Encontrar trabajo
Tras años de ‘sequía’, la Administración General del Estado creará empleo neto por primera vez en 2017 y 2018. Se trata de unas 20.000 plazas de las que un 40 por ciento responden a reemplazos de jubilaciones y, cerca de un 25 por ciento, a nuevos puestos para funcionarios en varios organismos, como la Agencia Tributaria, las oficinas del DNI o la DGT.
Y es que preparar una oposición es una de las opciones a la hora de buscar trabajo, una tarea ardua que no solo requiere un buen currículo –ahora puede hacerse con el asesoramiento de un especialista en internet– y conocer el funcionamiento de las ETT e intermediarios laborales, sino saber moverse en las redes sociales y crear relaciones profesionales porque, según un informe de Adecco, solo el 20 por ciento de la oferta es visible y se hace a través de procesos de selección abiertos.
Si ya le has entregado tu currículo a compañeros, amigos y familiares, toca activar la búsqueda en la red. Para llamar la atención, una de las estrategias consiste en participar en los foros de plataformas del sector en el que quieras dejarte ver. También puedes visitar los departamentos de Recursos Humanos de grandes empresas y colgar tu solicitud.
Las apps son de gran ayuda, pero descarga solo las que te interesen. Es mucho mejor tener pocas, pero conocerlas bien para poder exprimir todas sus posibilidades. Si después de un tiempo razonable compruebas que no te sirve, recházala y prueba con otra. Úsalas para acceder a información y contactos nuevos, que te abran puertas directas.
Otro de los aspectos que debes trabajar es tu presentación, más aún si es por internet. Los expertos consideran que si eres especialista en todo, no eres profesional en nada. Las candidaturas espontáneas tienen posibilidades porque los que contratan son personas, no empresas, y puedes tocar la tecla adecuada.
No te expongas
El portal de empleo Infojobs.net advierte que el 60 por ciento de las empresas consulta las redes sociales para encontrar y valorar a las personas que aspiran a un puesto y, en uno de cada tres procesos de selección, se descarta al candidato por la información que hay de él en la red. De ahí que sea importante valorar los datos y opiniones antes de subirlos.
Las personas con más de 50 años lo tendrán más fácil si confían en sí mismas y hacen valer su experiencia. En estos casos, no conviene mentir sobre la edad –tampoco hay que gritar los años que tienes– porque en este aspecto, como en otros, la sinceridad es importante; se valora el interés por aprender y una actitud optimista y con ganas de modernizarse. Una forma de demostrarlo es realizar cursos y mantener una actitud activa en portales profesionales como LinkedIn o en redes sociales como Facebook o Twitter.