Estrena en el Teatro Español de Madrid su tercera obra como directora, El ángel exterminador
Actriz todoterreno, con más de 30 años de profesión a sus espaldas, a Blanca Portillo le gusta asumir riesgos, como la versión teatral de El ángel exterminador de Luis Buñuel, tercera obra en su carrera, en la que participan 20 actores como Dani Muriel, Inma Cuevas, Ramón Ibarra o Cristina Plazas, en el Español de Madrid.
¿Qué te enamoró de esta adaptación?
Que el filme, en su día, rompió límites como solo los clásicos lo hacen y creó un lenguaje propio. Él era un hombre fascinante.
¿Por qué, ahora que la política está tan devaluada?
Entiendo el teatro como un espejo de la sociedad. Tiene una visión política, pero también es una obra sobre el ser humano en su vida social, en la que hay humor y mordacidad.
¿Crees que ahora somos menos solidarios?
Sí, y cada día más crueles, pese a que la vida parece más fácil. La obra es una invitación a que la gente mire alrededor, al que tiene poder y al que no.
¿Aportas una visión femenina de la crítica social?
Soy mujer y ejerzo de ello, ¡no lo puedo evitar! (risas).
¿Sigue habiendo barreras para las mujeres a la hora de dirigir?
Por supuesto. Hay poquísimas directoras frente a directores, también en otros ámbitos, y diferencia salariales y de trato. Yo he sufrido desigualdad y muchas más cosas. Para no ser cómplices de esa situación, hay que decirlo.
¿Qué te ha aportado dirigir este drama?
Lo primero es que te hace tomar conciencia de tus propios encierros, pero al final te lleva a creer más en tu capacidad de adaptación. Tengo mucha suerte con mis trabajos.
Es la tercera obra que diriges, y la primera por encargo…
Este montaje es grande, y no podía rechazar la oferta de Carme Portaceli, directora del Español. Al principio me asustó por si me calificaban de demasiado osada, ya que Buñuel es enorme.
¿Desde cuándo disfrutas con tu profesión?
De pequeña inventaba historias con mis siete hermanos, pero me enganchó cuando me metí en un grupo de teatro y descubrí que me gustaba contar las cosas así.