Picasso según Banderas
Después del físico alemán Albert Einstein, el pintor malagueño es el siguiente genio de la serie de diez capítulos que veremos en National Geographic.
Encarnar a un paisano como Picasso ha sido para Antonio Banderas un sueño hecho realidad. Pero también un trabajo extenuante del que necesita distanciarse para ‘despegarse del cuadro’. El actor nos explica con detalle su papel para la serie de National Geographic que le llevó seis meses.
Las biografías del pintor lo retratan como mal padre, mal amigo, manipulador, oportunista, abusador…
Nunca me planteo juicios morales de los personajes que interpreto, porque no podría trabajar. Me someto a los hechos y National Geographic ha hecho una labor impecable para mostrar su vida. ¿Mal padre? He hablado con mucha gente que lo conoció y hay opiniones contrarias. Tengo buena relación con su nieto Oliver y charlé con Maya, su madre, y me dijo que adoraba a su padre. No puedo convertirme en un Franco y señalar con el dedo a la gente sin tener información suficiente. Estoy contra los abusos, desde luego, pero de ahí a juzgar con ligereza… Claro que ignoraba lo del productor Harvey Weinstein; mi amiga Salma Hayek me dijo que le dio miedo denunciarlo.
¿Fue Picasso cruel con las mujeres?
Era un hombre infiel. Estando con Olga Khokhlova se engancha con Marie Thérèse Walter. Y estando con esta, se lía con Dora Maar… Le gustaba que las mujeres se pelearan por él. Pero no estamos tratando de glorificarlo, sino de ver los claroscuros de su personalidad. Tenía poder, era rico, famoso… El único caso donde veo que puede haber una conducta punible desde el punto de vista incluso legal fue con Teresa, porque solo tenía 16 años cuando lo conoció. Sin embargo, es la única que siguió queriéndolo hasta el final de su vida.
En el primer capítulo se ve que no quería pintar el Guernica…
Es que Pablo Picasso era su propio planeta, su propio país y su propia ideología. Era del Partido Comunista pero lo visitaban los nazis en su estudio, donde un oficial se encaprichó de muchos de sus cuadros. Cuando el poeta Jean Cocteau le pide que firme una carta para pedir la liberación de Max Jacob, él se niega. Y tampoco hizo declaraciones sobre la guerra civil española. Nunca.
“Nunca me planteo juicios morales
sobre mis personajes”
Ayudó a algunas de sus mujeres.
A todas. Nunca las abandonó económicamente.
¿Tú has cobrado más que tus compañeras en alguna película?
No lo recuerdo. En ocasiones podía ganar yo más, pero también me he encontrado con hombres que cobraban más y otros menos que yo, o mujeres. Nunca lo he achacado al género, sinceramente. En Hollywood las valoraciones pueden ser muy raras. Por ejemplo, si eres estrella en determinados países y saben que la película se va a vender allí, puedes ganar bastante más.
“Él era su propio planeta, su propio país y su propia ideología”