Cine. Unaleyendadeladanza
Icíar Bollaín recrea la vida del cubano Carlos Acosta, primer bailarín negro del Royal Ballet de Londres.
Carlos Acosta, el gran referente cultural cubano, nunca quiso bailar. Él soñaba con ser una estrella del fútbol. Pero su padre, un camionero analfabeto, maltratador y descendiente de esclavos, supo que la danza podría sacar a su hijo, al que llamaba Yuli, de la pobreza y la marginación racial del barrio de Los Pinos, donde vivían.
A los 9 años le matriculó en la escuela elemental de ballet, y con 16 ganó la medal la de oro en el Grand Prix de Lausanne. Dos años más tarde, el English National Ballet le contrató como primer bailarín, y en 1998 se convirtió en la gran estrella del Royal Ballet de Londres, junto a la española Tamara Rojo.
Guion premiado
Sus años de soledad e incomprensión y sus ganas de volver a Cuba los plasmó en No mires atrás, unas memorias que publicó en 2006 y que el guionista escocés Paul Laverty –Premio del Jurado al Mejor Guion en San Sebastián– ha convertido en el libreto de la nueva película de su pareja, Icíar Bollaín. El filme transcurre en la actualidad, en La Habana, cuando Carlos
prepara una coreografía sobre su vida y va transformando sus recuerdos más cruciales en números de danza coreografiados por María Rovira.
Edilson Manuel Olbera Núñez, Keyvin Martínez y el propio Carlos Acosta, interpretan a esta leyenda de la danza en esa producción que transcurre paralela a la historia de Cuba, desde el exilio a Miami, pasando por el periodo especial, hasta la crisis de los balseros, que cuenta con una maravillosa fotografía de Alex Catalán – tonos cálidos para la parte caribeña, y tonos fríos para su estan- cia europea–, y una envolvente banda sonora de Alberto Iglesias.
■ +16 ESP.-CUB.-R.U.-ALEM. 2018. Biográfica. 115 min. Dir.: Icíar Bollaín. Int.: Carlos Acosta, Keyvin Martínez, S. Alfonso. #Yuli