Saca a pasear las piernas
Ahora sí. Llegó el momento de descubrirlas... ¡en la calle! Lúcelas por fin con este programa drenante y exprés que te proponemos.
Parecía que el día no llegaría nunca... pero ahí está, ese momento de mirar de cerca todo lo que hemos escondido bajo la ropa durante todo el invierno... y parte de esta primavera confinada que no olvidaremos nunca. Empezaremos por las piernas, mucho antes de reunir el coraje para hacerlo con el bikini. Así que nos vamos a centrar en las primeras en salir a escena. Para ello, tendremos que lidiar con la santísima trinidad de lo que las acecha: la hinchazón debida a la retención de líquidos, la celulitis, y un tono más aburrido de lo que estamos nosotros.
Primer paso: deshinchar
No es novedad que la clave de la belleza, y de la salud, se encuentra en una alimentación sana y variada. Pero si además quieres drenar tus piernas y hacer frente a la retención de líquidos, no olvides que tu dieta ha de ser baja en sal (evita aceitunas, anchoas, embutidos, platos pre-cocinados, quesos curados o conservas), priorizando verduras y frutas (los diuréticos por excelencia) como espárragos y alcachofas, e infusiones como la de diente de león. Y en la ducha, exfólialas con un producto específico dando masajes desde los tobillos hasta las ingles.
Segundo paso: alisar
La falta de hierro favorece la aparición de celulitis y dificulta su eliminación. Así que opta por las carnes magras, las legumbres, el pescado y el marisco. Te ayudará una crema anticelulítica que puedes aplicar después de la ducha y antes de acostarte. Recuerda hacer fricciones enérgicas en sentido circular y con movimientos ascendentes, tanto en los muslos como en los glúteos. Y si utilizas el puño y los nudillos de los dedos, harás más presión.
Tercer paso: tonificar
Estás a tiempo de tonificar tus piernas si te conciencias para olvidarte del ascensor hasta que llegue el verano y subes las escaleras de tu casa, aparte de dar un paseo diario de mínimo 20 minutos. Además, este sencillo ejercicio te puede ayudar: tumbada boca arriba, con las manos detrás de tu cabeza y los talones apoyados en una silla, sube los glúteos hasta crear una línea recta con tu cuerpo. Repite 10 veces. También te ayudará colocarte de pie, con los pies ligeramente separados y las rodillas algo flexionadas, y ponerte de puntillas para ejercer fuerza en los gemelos.
Cuarto paso: dar color
Para evitar el tono cetrino mientras van tomando el color típico de la primavera, prueba los autobronceadores de última generación, sin el color naranja de antaño, sin teñir la ropa y sin surcos en los pliegues de la rodilla. Existen en varias texturas: gel, crema y spray. Aplica, deja secar 5 minutos, y verás su efecto. Importante para un tono homogéneo: exfolia una vez por semana.
Sube y baja 100 escalones al día para reactivar
tus piernas