NIEBLA Y BARRO EN LA BAJA ALMANZORA
La meteorología ha mediatizado las dos primeras citas del certamen, ya que la primera carrera calendada, el Rally TT Lleida Pirineus, se debió suspender al caer una fuerte nevada cuando solo se había disputado la prologo, como te contamos en el anterior número de Fórmula TodoTerreno. En cuanto a la segunda cita, la Baja Almanzora, se corrió bajo fuertes aguaceros, con bajas temperaturas y serios bancos de niebla. Hubo continuas alternativas por la victoria en varias fases de la carrera, siendo las distancias muy cortas en la clasificación final y registrándose multitud de abandonos, ya que menos de la mitad del casi medio centenar de equipos que tomaron la salida, consiguió alcanzar la meta, siendo muchos de estos reenganchados tras retirarse en los primeros tramos. El terreno estaba muy delicado, y los vadeos tenían una altura de agua considerable, lo que obligóa los deportistas a trabajar contra el barro todo el fin de semana. Tras cerca de 700 kilómetros contra el cronómetro en esta carrera, resultaron vencedores Antonio Fortuny y Guifre Pujol, a bordo de un Toyota Hilux ( en la imagen de la derecha). Con un prototipo artesanal, el local José Antonio Hinojo, copilotado por Jorge Saiz, fue segundo, cerrando el podio el Ssanyong Tivoli oficial de Óscar Fuertes e Isidro Cuadrado, del que pronto te ofreceremos una toma de contacto. A continuación se clasificó el primer prototipo nacional y de paso ganador de la Evo Cup de Mitsubishi, el L200 de Jesús Cámara y su copiloto José Mata. Quinto acabó el primer buggy ligero, el Polaris de Peña-Fuentes. El primer coche de serie ( T-2) fue el Mitsubishi Montero de Enrique de Dios y David González, y el ganador en regularidad fue el Opel Frontera de Gabriel Ubago. La próxima cita será en tierras jienenses en el Rally Todo Terreno Mar de Olivos, donde precisamente Cristina Gutiérrez tiene pensado reaparecer en competición.