¿EL NUEVO LAND ROVER DISCOVERY MANTIENE EL TIPO EN CAMPO?
TÚ PREGUNTAS Tengo un Land Rover Discovery TD5 que durante años no me ha dado ningún problema, pero ya empieza a tener achaques, y es el momento de cambiarlo. El uso que le doy es familiar preferentemente, urbano la mayor parte del año, con el típico viaje a a la playa en verano. Además, durante la temporada de invierno, sube a esquiar todos o casi todos los fines de semana. El nuevo Discovery me parece precioso, pero me da la sensación de que voy a perder cualidades todoterreno. ¿Es una percepción mía o es así realmente? José Antonio Ruiz, Zaragoza TT RESPONDE Si comparamos versiones estrictamente de serie, sin ningún tipo de preparación, no creemos que haya ningún escenario en el que un Land Rover Discovery II pueda pasar y un nuevo Discovery no pueda hacerlo. De hecho, hay algunos escenarios que a los Discovery
I y II se les atragantan bastante, como los cruces de puentes en los que una rueda delantera y la trasera opuesta quedan en el aire, y la ausencia de bloqueos en los diferenciales de ambos ejes impide el avance. Este tipo de situaciones son resueltas con absoluta facilidad por el actual modelo. Por otra parte, puedes encontrar pasos muy angostos en los que tu Discovery cabrá “por los pelos” y en los que el nuevo modelo, sencillamente, no podrá pasar por su mayor anchura. Evidentemente, el nuevo Discovery no es lo que era. Resulta mucho más caro y dispone de abundante electrónica, difícil de diagnosticar y reparar si te embarcas en una ruta de larga duración por África, Asia o Sudamérica, aparte de requerir combustibles más refinados. A cambio, ofrece un confort, una facilidad de conducción, una potencia y un equipamiento con los que los Discovery I y II no pueden ni soñar.
En cuanto a las cotas TT, gracias a la suspensión neumática contamos con un ángulo de entrada de 34º, 30º de salida y 27º en el caso del ventral, cotas con las que se pueden hacer muchas cosas. Es más, según los catálogos comerciales, cuenta incluso con una profundidad de vadeo de 900 milímetros, claramente superior a la que teóricamente puede superar tu Discovery.
El mayor inconveniente reside en las gomas de serie, decididamente de carretera, que dan muy pocas opciones para salir fuera del asfalto. Ahora bien, hay previstos excelentes neumáticos MT como accesorio, que puedes incluso montar en un concesionario oficial. En cualquier caso, el nuevo Discovery encaja perfectamente en la filosofía de uso que nos describes. El TD5 es sin duda un vehículo más adaptado al uso fuera del asfalto, pero los tiempos mandan, y los fabricantes buscan más un vehículo de asfalto que pueda salir fuera del mismo de forma más o menos eventual en lugar de justo lo opuesto. Esa tarea se la dejan prácticamente a los pick up y, en el caso de Land Rover, a la gama Defender, que próximamente dispondrá de nuevos modelos. ■