LOS CONSEJOS DE MAITE MAIORA
Hacer cross te obliga a acostumbrarte a gestionar momentos de agonía. Algo que sin duda te vendrá muy bien de cara a afrontar los últimos kilómetros en cualquier carrera de trail y más aún en los kilómetros verticales. Al disputarse por terreros irregulares, barro, hierba, etc.., parecidos a muchos de los que también te puedes encontrar en la montaña, esto hará que tu musculatura se vaya acostumbrando. Entrenar para después competir en cross te obliga a hacer sesiones a ritmos altos, más de lo habitual. Luego eso tiene una buena transferencia a las competiciones de trail en las que también hay tramos más o menos planos y en los que se puede ir más rápido con menos esfuerzo. En el cross tienes que correr apoyando mucho con los metatarsos y la parte delantera del pie, lo que hace que tu pisada se acostumbre y sea más efectiva corriendo. Lo mejor del cross, ¡correr con zapatillas con clavos! (ironía por supuesto)