UP& DOWN

YA ES HORA DE QUE LOS RUNNERS SE VAYAN A DORMIR

¿Cuál es tu mejor recuerdo de la infancia? Pasar todas las tardes en la calle con los amigos hasta que se escondía el sol, practicando deporte, juegos tradicionales, haciendo cabañas de todos los tamaños, explorando cuevas, etc. ¿Cuándo fue la última vez que lloraste? En el Cto. del mundo de Orientación. Cuando mi mejor amigo, Andreu, volvió a quedar 7º a medio segundo del diploma y 3" de la medalla ( igual que en 2015). ¿Qué programa de televisión recuerdas de pequeño? Art Attack ¿Qué libro has vuelto a leer? Hacia rutas salvajes. ¿Qué libro nunca pudiste acabar?

El Hobbit (en inglés). ¿Un consejo para no olvidar? Construye tu propio carácter, sé humilde y nunca olvides de dónde vienes. ¿Qué te gustaría ser de mayor? Docente. ¿Un héroe de novela? Robin Hood. ¿A qué huele la montaña? A vida. ¿Tu tesoro más preciado? Mi familia. ¿Dónde habita tu felicidad? En el deporte, la naturaleza y compartir pequeños momentos con buena gente. ANTONIO MARTÍNEZ Irrumpió en el mundo del trail por la puerta de atrás de un Campeonato de Europa que se celebró coincidiendo con la última edición de Gorbeia Suzien en 2017. Llegó sin hacer mucho ruido y se fue con un segundo puesto en la clasificación, sólo superado por Aritz Egea. Parece que desde el primer momento tenía la ruta bien marcada y las ideas muy claras, constancia y rumbo acertado son sus líneas maestras. Antonio es alicantino y ahora ha vuelto a fijar su residencia en Onil después de unos años viviendo en Madrid y dedicándose profesionalmente al deporte de la orientación en el que ha destacado entre la élite europea y mundial. En esta temporada que está terminando ha militado en las filas del Wild Trail Project apoyado por la marca Nike Trail y sus escarceos con las carreras de montaña han sido algo menos esporádicos que lo que nos tenía acostumbrados, viajando a Escocia a la prueba del Mundial y ganando hace tan sólo unos días en la distancia de media maratón de la Ultra Pirineu. En las distancias cortas Antonio es comedido y discreto pero con muchas ganas de aprender, un excelente escuchante y un mejor compañero de equipo. Cuando se pone un dorsal, es competitivo al 100 por 100 y así lo demuestran sus resultados hasta ahora, aunque estamos seguros de que lo bueno está por llegar y que va a dar mucho que hablar. Además, en este caso, no nos cabe la menor duda de que Antonio no va a perder el norte.