Qué es el Gas Natural
Dependiendo del lugar de extracción la composición química del gas natural está encabezada por el metano (82%), seguida del etano (12%) y del propano (2%), con una proporción de CO2 de aproximadamente el 3%. En situación normal el gas natural carece de olor, de ahí que se le añada mercaptano con el objetivo de que los posibles escapes puedan ser detectados a través del olfato.
Se calcula que las reservas de gas natural suman en la actualidad unos 185 billones de metros cúbicos, una cantidad que los expertos consideran suficiente para asegurar unos 50 años de consumo. El 43% de estas reservas se encuentran localizadas en Oriente Medio y el 31% en la zona de Asia Central.
Para su empleo en automoción el gas natural se utiliza en forma comprimida (GNC) y licuada (GNL), con un rango de utilización en corta y media distancia para el GNC (300 a 500 km) y de larga distancia para el GNL (800-1.500 km) en función de la menor o mayor capacidad de los depósitos utilizados y del tipo de motorización empleada.
El GNC exige un almacenaje a 200 bares de presión, mientras que por el contrario el GNL opera a presión atmosférica, aunque a favor de la primera opción está la capacidad de utilizar biogás (gas natural renovable) en cualquier proporción acercándose con ello al listón de las “cero emisiones”.