El Conquistador

l concepto de castillo reconvertido en majestuoso hotel surgió en los años veinte con los Paradores. Pablo Carrington (San Sebastián, 1971) le ha dado la vuelta a la idea con Cap Rocat, en Mallorca. Carrington, hijo de estadounidense y española, ha vivido toda su vida entre varias culturas: se formó en el Boston College y trabajó como consultor financiero en Francia. En 2010 abrió sus primeros hoteles boutique: Cap Rocat y Viura, a los que han seguido varios más agrupados bajo el grupo Marugal. Cap Rocat es una antigua fortaleza militar de piedra a la entrada de la Bahía de Palma. Las habitaciones ocupan el lugar que antes servía de almacén de munición y las mesas descansan sobre los caballetes en los que se colocaban los cañones. The Sea Club, el restaurante que se encuentra sobre los acantilados, hace que Cinquante Cinq en St. Tropez parezca un McDonald’s a su lado. Viura, en LaRioja, es unprodigioarquitectónicoenunazonadonde ya Frank Gehry dejó su impronta en el Hotel Marqués de Riscal Elciego. Un detalle que ilustra el concepto de hotel Carrington: en Viura, varios agricultores jubilados recogen cada mañana alrededor de diez kilos de moras frescas de los zarzales cercanos para disfrute de los clientes. “El lujo es algo intangible”, afirma Carrington. “No tiene nada que ver con el grosor de las alfombras o el tamaño de la televisión, sino con la sensación de sentirse cuidado y encontrarse a gusto en un lugar. También es importante que uno perciba que tiene su espacio y que lo pueden dejar tranquilo”. Y esta filosofía de la tranquilidad exclusiva parece que ha tenido éxito: a finales de mes Carrington abre el Hotel Tótem enMadrid y el año que viene planea invadir Francia con establecimientos en Chambord, en el valle del Loira, y en Fontaineblau. boutique de