SOSTENIBILIDAD.
La colección Conscious Exclusive de H&M.
PARA SU NUEVA COLECCIÓN CONSCIOUS EXCLUSIVE, ELABORADA CON MATERIALES SOSTENIBLES, H&M INDAGA EN SUS RAÍCES ESTÉTICAS HOMENAJEANDO EL LEGADO DE LA PAREJA DE ARTISTAS SUECOS CARL Y KARIN LARSSON.
En pleno corazón de la campiña sueca, a casi tres horas de viaje desde Estocolmo, se encuentra la pintoresca localidad de Sundborn, cuya principal atracción turística es la finca donde vivió a finales del siglo XIX el matrimonio Larsson, dos de los mayores artífices de la corriente Arts and Crafts, precursores de lo que hoy es universalmente conocido como el interiorismo escandinavo. Paseando por este idílico refugio fue como Ann-Sofie Johansson, consejera creativa de H&M supo que había encontrado el punto de partida para la nueva colección Conscious Exclusive. Esta propuesta de edición limitada que la marca presenta anualmente y con la que apuesta por los materiales reciclados ya va por su séptima entrega y se ha convertido en uno de sus grandes orgullos. «Desde el primer lanzamiento, la filosofía de esta línea ha sido la de ofrecer al público una moda sostenible que también resultara asequible pero, al mismo tiempo, conseguir que la sostenibilidad sea percibida como algo apetecible», asegura Johansson. Ser una empresa internacional ha sido lo que les ha permitido abrir una senda en lo que a concienciación se refiere, financiando una serie de avances tecnológicos que permiten el reciclaje de fibras para dar lugar a nuevos tejidos y materiales, otorgándoles una credibilidad no solo de cara a los consumidores sino también hacia el resto de la industria, que ha comenzado a sumarse a este movimien- to. La estrella en esta ocasión se llama Econyl, una revolucionaria fibra 100% regenerada a partir de redes de pesca y otros restos de nylon con la que han elaborado delicados vestidos de encaje entre otras prendas. «Es fundamental dejar claro que la principal aspiración de esta colección, así como todas las demas que lanzamos, es la de transmitir un concepto de moda, porque no hay nada menos sostenible que diseñar ropa que na-
die quiere ponerse», reconoce Johansson. El romanticismo y el lirismo de las acuarelas de Karin Larsson, o los tapices que bordó para decorar su residencia están plasmados en blusas de jacquard con jaretas y mangas de volantes, trajes sastre de acabado metalizado o un batín de lino blanco con bordados de seda negra que bien podría haber salido del taller de Paul Poiret. La innovación también llega por parte de los accesorios, con la primera línea de joyas creada bajo esta nueva filosofía, de formas vegetales y florales, con plata reciclada de antiguas cuberterías.
Al frente del equipo de sostenibilidad se encuentra Anna Gedda, cuya estrategía toma forma no solo en esta línea sino que impregna cada lanzamiento de la firma. «Para 2030 queremos que todos los recursos que utilicemos sean reciclados, pero para eso hay que romper muchas barreras», nos explica. «El poder social de la moda es inmenso y hay que aprovechar ese potencial»