El autocuidado empieza en la piel
C“Creer, crear y crecer” son las tres palabras que Alejandra G. Remón siempre lleva consigo. Tres verbos que resumen a la perfección la filosofía de vida de esta artista multidisciplinar madrileña con muchos proyectos en su horizonte. Acaba de publicar su libro de láminas Expo Book (ed. Lunwerg), prepara una exposición en la galería Échale Guindas (del 29 de abril al 15 de mayo) y ya está trabajando en su cuarto libro, que saldrá a finales de este año. Con todo esto entre manos, confiesa que practicar el autocuidado y llevar a cabo un buen ritual facial diario es clave para sentirse bien. Defiende la belleza de lo único y subjetivo, por eso no podría haber mejor elección que ella para comunicar la gama HealthyAging+ de Laboratorios Babé, que aboga por hablar de cosmética proedad en lugar de antiedad. ¿Qué es para ti el autocuidado? Es el cariño a una misma, como una meditación, un instante en el que el tiempo es por y para ti. Creo que es algo muy necesario, pues conlleva observarse, reconocerse, aceptarse, y al final ahí está la clave de todo lo demás, lo auténtico, lo genuino, el yo, el quererte. Autocuidado es darse mimos.
¿Cómo es tu rutina de belleza?
Llevo cuidándome muchos años, desde los 20. Es un mundo que siempre me ha llamado la atención porque lo observaba en mi madre, en mi hermana, siempre tenían un ratito para darse sus cremas, sus mascarillas… es algo que absorbí. Sigo todo el ritual de desmaquillarme, el tónico, el sérum, la crema de noche, el contorno de ojos. También he empezado con los masajes faciales con piezas de porcelana o con los dedos.
¿En qué te fijas para escoger tus cosméticos?
Más allá de que tengan propiedades antienvejecimiento, busco que me sienten bien en ese momento y que me protejan (por ejemplo, de las radiaciones solares). Lo más importante es que la piel esté lo mejor posible acorde con tu edad ■