El Pais (Uruguay) - El empresario
«En el futuro habrá más puestos de trabajo que hoy»
Experto de Adecco reconoce una desconexión entre oferta y demanda laboral y explica cómo conciliarlas
Si no reaccionamos rápido frente a la retención de talento, la revolución nos pasará por encima», sentenció el CEO de Adecco de Group Argentina y Uruguay, Francisco Martínez.
El ejecutivo de origen español, que trabaja hace más de 22 años en la firma líder en servicios de RR.HH., fue tajante sobre la postura que deben tomar las organizaciones respecto a la transformación que está experimentando el mercado laboral: «Se habla del futuro del trabajo, pero esto es algo que se ve hoy. Si no cambiamos, no habrá personas capacitadas para los puestos que requieren las industrias».
Rechazó la visión pesimista de algunos expertos que afirman que desaparecerán millones de puestos a nivel mundial en unos años. En su opinión, lo que se suprimirán serán ciertos perfiles y oficios, pero éstos darán origen a una cantidad mayor de empleos que los que hoy hay. Se crearán nuevas oportunidades que sobrepasarán los puestos actuales para enfrentar el nuevo paradigma laboral.
El desempleo que se percibe en muchos sectores de la industria, aseguró, es propio de la desconexión que existe en la relación entre oferta y demanda. En este punto, identificó tres ramas que tienen la «responsabilidad» de unificar este modelo: Estado, instituciones educativas y empresas.
El primero debe establecer políticas de atracción de talento, económicas, sociales y educativas para generar un marco adecuado para el mercado laboral. A su vez, las instituciones educativas tienen el compromiso de preparar a los jóvenes con las habilidades y competencias que se requerirán en el futuro. Por último, las firmas tienen que adaptarse a las necesidades del mundo del trabajo y saber captar el talento.
Hoy se está lejos de esta realidad. «Muchas compañías piden nuevos perfiles o incluso algunos que aún no encuentran en el mercado. La carrera de community manager es relativa- mente nueva. Sin embargo, es uno de los oficios más codiciados por las empresas», ejemplificó Martínez. Y acotó: «Algunos de los mejores community managers del mercado son autodidactas, que han ido complementando sus conocimientos con estudios que han ido apareciendo».
En los programas educativos se trabaja mucho en las competencias técnicas, aunque las empresas cada vez priorizan más las habilidades blandas (aptitudes, rasgos de personalidad, conocimientos y valores adquiridos, entre otros). «Solo en determinados oficios o carreras es importante el título universitario», dijo. Para ser médico hay que serlo, pero para puestos comerciales o dirigir una firma no es necesario un diploma. «La formación tiene que estar, pero dentro del contexto que pide el mercado laboral», aseguró. Añadió que es preferente contratar una persona que no sea la número uno académicamente, pero tenga más habilidades blandas.
Hay mercados -como el europeo o estadounidense- más maduros en el tema que actúan de esta forma. No así Latinoamérica, donde prima más el título o la universidad en la que se estudió que la personalidad, las habilidades blandas o la forma de gestión de un individuo.
HACIA EL TRABAJO REMOTO
La modalidad de trabajo también está experimentando un cambio. Cada vez son más las personas que optan por empleos freelance para tener una relación de trabajo más flexible. No significa que reduzcan su carga horaria sino que manejen su tiempo de forma distinta. Un día trabaja 12 horas y otro dos. Son ellos quienes se administran y gestionan a su gusto sin que una empresa les marque un cronograma, remarcó.
Pese a que crecen estos empleos, los marcos laborales están desactualizados. La mayoría de los convenios colectivos no regulan a estos trabajadores, que deberían tener los mismos derechos que los dependientes.
A los trabajos independientes se suma la modalidad home office. «El paradigma del empleo local está desapareciendo. Un desarrollador web bueno, no tiene que ofrecer sus servicios solo en su país sino al mundo. Muchas compañías contratan profesionales que se hallan a 15.000 kilómetros de distancia», aseguró. «En unos años esta modalidad no será la excepción, sino la norma», proyectó.