Una noche de furia Santander, el héroe tricolor
Jugó mal pero sacó adelante el partido con polémicas incluidas
Como cosa de mandinga, la lluvia se largó otra vez cuando el árbitro Hernán Heras pitó el comienzo del partido entre Miramar Misiones y Nacional en el Franzini. No solo lluvia, también viento. Mucho viento. El que provocó que en el primer tiempo los saques de Lucero Álvarez quedaran cortos y que existiera una imprecisión inusual en algunos futbolistas, como Diego Zabala.
Los Cebritas fueron superiores en la primera mitad, encontraron un espacio propicio para atacar a las espaldas de Leandro Lozano, porque Nacional adelantaba sus líneas y quedaba expuesto, con un retroceso defensivo lento, en una noche donde Franco Romero no pudo repetir el rendimientos de los partidos anteriores.
Así fue que Mauricio Gómez
alertó a Nacional que Miramar no sería un hueso duro de roer con un remate que sacó Mejía y, pocos minutos después, Maxi Lombardi tiró apenas por arriba un intento frontal. A su vez, Alexander Machado —el mejor jugador del partido— tuvo un mano a mano que tapó el arquero panameño, quien nada pudo hacer a los 36’ cuando el atacante abrió la cuenta en una jugada que habilitó Leandro Lozano.
La virtud de Nacional fue encontrar el empate rápido, cuando Zabala logró filtrar entre líneas la única pelota de los primeros 45’ y Gonzalo Carneiro hizo un certero movimiento para sentenciar el 1-1 cuando la lluvia volvía a decir presente en el Franzini y los hinchas tricolores que estaban en la tribuna principal le dedicaban el gol al Chino Lasalvia —responsable de Miramar Misiones e hincha confeso de Peñarol— que estaba en la cabecera junto a otros integrantes de la institución oriunda de Villa Dolores.
En los primeros minutos del complemento, Nacional mejoró ostensiblemente, liderado por Diego Polenta y más tarde por el buen ingreso de Jeremía Recoba. Si bien los Bolsos no pudieron plasmar en el marcador esa supremacía, daba la sensación de que el gol podía caer. Pero no llegó y a medida que se fue acercando el tramo final del juego, parecía que la mitad de la cancha no existía porque iban de un área a otra, aunque les costaba a ambos finalizar las jugadas.
Miramar logró el 2-1 con otro gol de Machado a los 75’, pero el VAR comandado por Christian Ferreyra anuló la incidencia por offside de Ignacio Yepez, que realizó el pase previo. Las líneas trazadas en la cabina de videoarbitraje dejaron más dudas que certezas y todos los Cebritas explotaron de ira, en especial el DT Ricardo Caruso Lombardi. Más todavía cuando Federico Santander puso el 2-1 en el final y le dio el triunfo a Nacional.