El Pais (Uruguay) - Revista domingo
Ocho artistas para un largo siglo
Ocho artistas significativos para la conformación del arte de la última modernidad: Manet, Degas, Matisse, Picasso, Pollock, de Kooning, Freud (Lucian, nieto de Sigmund) y Bacon. Todos ellos pintores, todos asociados a rupturas importantes en la historia de su disciplina. El arco de vidas que abarca este conjunto de nombres va desde el nacimiento de Manet, en 1832, hasta la muerte de Freud, en 2011. Pero lo que le interesa a Sebastian Smee, autor de El arte de la rivali
dad, es el siglo que va desde 1860 hasta 1960. A lo largo de esos cien años se produjo la agonía de la modernidad, con un espasmo final que, a partir de las vanguardias de principios del siglo XX, mantuvo estertores hasta que Warhol desconectó los respiradores hace sesenta años.
A partir de los vínculos personales, de amistad y competencia, de los pares Manet –Degas, Matisse – Picasso, Pollock – de Kooning y Freud – Bacon, Smee, crítico de arte y ganador del Pulitzer, recorre biografías de los ocho con bastante información acerca de sus vidas que, si bien no es nueva, quedan iluminadas por el hecho de ponerlas en contacto.
No dedica espacio a hablar del arte de los pintores, salvo generalidades. No parece importarle la distinción entre biografía e historia del arte, como si Wölfflin nunca hubiera escrito su libro clave
sobre el concepto de estilo. Cuando habla de un gesto inexplicable de Manet, que rompió un cuadro
que había pintado Degas, dice: “Lo que pasó a continuación viene desconcertando a los historiadores del
arte desde entonces”. Si bien es cierto que conocer la vida de un artista ayuda a entender algunos aspectos de su obra, el tono del libro se acerca más a una compilación de anécdotas que a un intento de conectar la obra y los acontecimientos biográficos clave.
El lector que más aprovechará este libro es el que tenga familiaridad con la historia del arte moderno y en particular con la obra de estos ocho extraordinarios artistas. Smee escribe con fluidez y a partir de firmes fuentes documentales. La extensión del libro admitiría que se tratara de una serie de cuatro monografías independientes, una para cada par de artistas; pero el autor vincula los pares a lo largo del texto, de manera que uno encuentra a Degas cuando se habla de Pollock y de Kooning, entre otras interconexiones. El orden del libro, en consecuencia, no sigue la cronología, sino más bien el rol de cada par en el curso de la pintura desde el nacimiento del impresionismo hasta el surgimiento del pop art y más allá.
EL ARTE DE LA RIVALIDAD, de Sebastian Smee. Taurus, 2017. Barcelona, 380 págs. Distribuye Penguin Random House.
ANDY WARHOL FUE QUIEN APAGÓ LOS RESPIRADORES