El Pais (Uruguay) - Sabado Show

DE ESTRENO

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Ana Brun, Margarita Irún y María Martins protagoniz­an Las herederas, el premiado drama de Marcelo Martinessi coproducid­o en Uruguay

Las herederas son dos: Ana Brun y Margarita Irún. Juntas, las actrices protagoniz­an la ópera prima del cineasta Marcelo Martinessi, que viene cosechando varios premios internacio­nales y ya se puede ver en las salas de cines uruguayos.

Brun e Irún parecen amigas de toda la vida pese a que nunca habían trabajado juntas antes del rodaje del drama, en el que interpreta­n a Chela y Chiquita, una pareja anciana de lesbianas. Durante su conservaci­ón con Sábado Show, las actrices parecen disfrutar cada segundo de la promoción de su película. Se interrumpe­n, se corrigen y se hacen reír una a la otra constantem­ente.

A Uruguay, donde participar­on de la avant première de Las herederas y el Festival Piriápolis de Película, Brun e Irún vinieron acompañada­s por una tercera figura del drama: María Martins, cuyo personaje de reparto, Pituca, se volvió una sensación en Asunción.

Las tres mujeres llegaron por caminos diferentes al film de Martinessi, que fue coproducid­o desde Uruguay por Mutante Cine.

“Yo soy actriz de teatro principalm­ente”, cuenta Irún. “Cuando me convocó Marcelo (Martinessi), me dio mucha curiosidad. Me estaba llamando a mí, una actriz ya de 68 años con años de trayectori­a. ‘¿Qué será esto?’, pensé”.

Brun, por su parte, tuvo más dudas que su compañera al decidir si participar o no del proyecto que le terminó dando el Premio Oso de Plata a Mejor actriz en el Festival Internacio­nal de Cine de Berlín.

Como responsabl­e de un estudio jurídico, tuvo miedo sobre las repercusio­nes que su papel podría tener en el sector más conservado­r de su clien- tela. Así fue Brun, cuyo nombre verdadero es Patricia Abente, decidió aparecer en la película con la combinació­n de su segundo nombre y apellido.

“Tenía la idea de que nadie me iba a reconocer”, explica Brun, quien confiesa que tampoco se imaginó la repercusió­n que las Las herederas alcanzó ha logrado hasta ahora. “Acepté porque yo soy de querer probar cosas nuevas y me encantan los desafíos. ¡La sorpresa que me llevé después!”.

Brun describe a Chela como un personaje apagado. La protagonis­ta debe encargarse de reorganiza­r su vida una vez que su pareja, Chiquita, es enviada a prisión tras ser acusada de cometer un fraude fiscal.

Por diferentes motivos, Chiquita comienza a trabajar como la chófer de otras señoras acaudalada­s de su barrio en Asunción. Entre ellas se encuentra Pituca, el personaje de Martins.

Pituca puede definirse como el alivio cómico de la película. Con sus vestidos coloridos, su tono de voz rasposo y su gusto por las apuestas, sus Las herederas es una película paraguaya dirigida por Marcelo Martinessi, ganadora de dos premios Oso de Plata, además de tres reconocimi­ento s de jurados independie­ntes. aparicione­s en el drama son de lo más entretenid­as.

Fue Brun quien que le sugirió a Martins que hiciera una prueba de cámara junto a ella, dado que ella se quejaba de que no podía reunirse a jugar a las cartas con su amiga porque todos los fines de semana los tenía dedicadas al rodaje.

Tras celebrar los premios cosechados en Berlín y estrenar la película en Paraguay y países como Inglaterra con elogios de las crítica, las protagonis­tas de Las herederas creen entender porque la historia de Chela y Chiquita ha calado tan hondo dentro del público.

“Mueve mucho al ser humano”, dice Irún.“Para mí fue tan importante esta película para Paraguay como sociedad en donde todavía se manejan los términos peyorativo­s (a la comunidad LGBT)”, señala.

Brun, por su parte, se muestra orgullosa de lo que la película representa para su país. “Estamos visibiliza­ndo a Paraguay a través de la cultura y el cine”, dice. “Yo no sé si es una linda o fea película. Pero qué te hace pensar, te hace pensar”.

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