Excarcelan a un cura procesado por abusos
Excanciller del arzobispado de Santiago de Chile
IILA Justicia chilena revocó ayer jueves la prisión que pesaba sobre el excanciller del arzobispado de Santiago, Óscar Muñoz, imputado por la presunta comisión de abusos sexuales de cinco menores en 2002, y le dejó con arresto domiciliario nocturno.
El sacerdote se encontraba cumpliendo la prisión cautelar desde el pasado 13 de julio.
El tribunal ordenó el arresto domiciliario mientras se cumple el plazo de 180 días de investigación por parte de la Policía de Investigaciones (PDI) de Chile.
En junio pasado, el fiscal regional de O’higgins, Emilio Arias, quien lleva la indagaciones, había manifestado que las víctimas de Muñoz eran menores de edad. Todas ellas fueron atacadas sexualmente en el domicilio del imputado y en el domicilio propio de las víctimas.
La investigación contra Muñoz es una de las 119 causas abiertas por la presunta comisión de delitos sexuales por parte de personas relacionadas con la Iglesia Católica, según información de Fiscalía Nacional de Chile.
En esos casos actualmente en marcha son 167 las personas imputadas y 178 las víctimas cuantificadas en todas estas investigaciones. Además, entre el total de víctimas, 79 de ellas eran menores en el momento en que ocurrieron los hechos.
En medio de la peor crisis que haya sufrido la Iglesia católica chilena en los últimos 40 años, el papa Francisco decretó el pasado 15 de septiembre “de forma inapelable” la destitución del sacerdote chileno Cristián Precht, quien está bajo investigación por su presunta participación en casos de abusos sexuales a menores. Víctimas de la Congregación de los Hermanos Maristas en Chile señalaron a Precht como partícipe de presuntos abusos sexuales a menores. Precht ya había sido sentenciado por la Justicia canónica y en diciembre de 2017 se cumplieron los cinco años de condena canónica que se le aplicaron por “conductas abusivas con menores y mayores de edad”.
El presidente Sebastián Piñera señaló el pasado martes, al término del Te deum en la catedral metropolitana de Santiago con motivo de las Fiestas Patrias, que la Iglesia católica chilena “sabe mejor que nadie” que se equivocó, en alusión a los abusos sexuales por parte de sacerdotes.